El equipo de gobierno de Navarra Suma en el Ayuntamiento de Tudela ha sido condenado por “despido improcedente” a una empleada municipal por tercera vez en mes y medio. El Juzgado de los Social de Navarra ha fallado a favor de la trabajadora demandante y ha condenado al Consistorio que preside Alejandro Toquero a volverla a contratar (“en las mismas condiciones en que se encontraba”) o a indemnizarla con 24.270,79 euros. Sumando las tres sentencias consecutivas que ha tenido en contra el Ayuntamiento de Tudela por el mismo motivo las indemnizaciones sumarían casi 100.000 euros (97.226 euros).

el fallo En este último caso hace referencia a una auxiliar de limpieza que trabajaba en el Servicio de Atención Domiciliaria (SAD) para la concejalía de Bienestar Social a la que el Consistorio le comunicó el 12 de abril de 2021 la “extinción del contrato al haberse acordado la amortización de la plaza”, que se hizo efectiva el día 30 de ese mismo mes. Esta trabajadora tenía una antigüedad superior a los 10 años (fue contratada el 1 de octubre de 2010), por lo que el tribunal del Juzgado de lo Social estima que el Ayuntamiento de Tudela “no ha seguido los trámites previstos para la extinción del contrato” razón por la cual “el cese debe declararse improcedente”.

Se da la circunstancia de tres meses después del despido, el 3 de agosto de ese mismo año 2021, el Ayuntamiento le volvió a contratar con una duración hasta el año 2024 a razón de 796 horas al año.

En sus alegaciones, el Ayuntamiento centró su defensa en dos aspectos, por un lado que ese Juzgado de lo Social no era competente en la materia para juzgarlo y, por otro, que de haber sentencia contraria el sueldo sobre el que se debía valorar la indemnización era de 1.385 euros. La sala no estimó ninguno de los dos razonamientos y estimó que la indemnización debía estimarse a 20 días a razón de un sueldo de 2.000,60 euros por despido improcedente.

Por este motivo el tribunal estima que la indemnización debe ser de 24.270,79 euros o, en su caso “readmitirla en las mismas condiciones” de jornada (que no lo tiene en la actualidad) y pagarle a razón de 65,77 euros/día brutos hasta por el período que hay entre el 30 de abril y el 3 de agosto de 2021, que es el período en que estuvo despedida.

La sentencia explica que “la demandante ha venido ocupando una plaza vacante durante más de 10 años lo que debe calificarse como una duración inusualmente larga que determina el carácter y su fraudulento del contrato y su consideración como trabajadora indefinida no fija”.

las anteriores La primera de las sentencias se dio a conocer en diciembre y en ella el Ayuntamiento de Tudela fue condenado por el Juzgado de lo Social a readmitir o indemnizar con más de 64.000 euros a una aparejadora que durante 15 años había trabajado en el Consistorio y que Navarra Suma decidió despedir el pasado mes de abril de 2021. La sentencia fue dictada a finales del pasado mes de noviembre y ha sido recurrida.

En la segunda de las sentencias, también a favor de otra trabajadora, la demandante denunció su despido al considerar que la obra por la que fue contratada no había terminado y que la relación laboral había devenido en indefinida. El citado despido improcedente se produjo el pasado 31 de octubre de 2020 a una trabajadora social que estaba desempeñando una trabajo en la concejalía de Servicios Sociales en un puesto para Primera Acogida. El Consistorio, según la sentencia, entendió que se trataba de un empleo cuya contratación era hasta final de obra, si bien el tribunal estimó que no era así.

La sentencia obligaba a “la readmisión de la trabajadora, con abono de los salarios dejados de percibir desde la fecha del despido hasta la notificación de la Sentencia, a razón de 82,04 €/día, descontando los salarios que pudiera haber percibido por posteriores empleos, o por el abono de una indemnización en cuantía 8.121,66 euros”.