Mañana domingo a las 12.00 horas comenzarán las fiestas de Elizondo. Quizás sean las fiestas más esperadas por toda la vecindad, al pasar casi tres años desde que se celebraron las últimas.

Una de las personas que con más ganas, y también nervios esperará el momento del chupinazo, será. Probablemente, Sami Ouady Dyian, elizondarra de 10 años que será el encargado de prender el primer cohete festivo. De todas maneras, este año el chupinazo será más especial, si cabe, porque no solamente el ganador del concurso de dibujos que organiza el pueblo de Elizondo, Sami, prenderá la mecha, sino que serán dos. 

Este año se cumplen 30 años desde que se celebraron los JJOO en Barcelona (curiosamente la ceremonia de apertura se celebró el 25 de julio, día de Santiago), donde Teresa Motos Izeta logró la medalla de oro en hockey hierba. Por ello, ha recibido la invitación de la comisión de fiestas, y también será protagonista del chupinazo. 

SAMI

Sami Oady Dyian es un chico de 10 años que acaba de cursar 5ª en la Escuela Pública de Elizondo. Un chico muy aplicado y sensato, al que le gustan las matemáticas y las lenguas. Saca muy buenas notas, y además da clases de francés e inglés; también algo de italiano, aunque, de momento, lo tiene un poco aparcado. A pesar de su corta edad, Sami tiene claro que quiere ser en el futuro: científico. También le gusta jugar al fútbol, “juego casi todos los días con mis amigos”, señala, además de formar parte del C.D. Baztan. 

Samy Ouady Ondikol

Dice sentirse “muy contento” de poder lanzar el chupinazo, aunque también reconoce cierto nerviosismo. No sabe qué dirá al prender la mecha, pero tiene claro que su amigo Oihan Bazterrika, que se está recuperando de una enfermedad, estará a su lado. 

Estos últimos días están siendo muy ajetreados para Sami, pues el viernes llegó tras un largo viaje de Marruecos, donde ha pasado las vacaciones con sus primos. Los padres de Sami llegaron a Elizondo hace 15 años desde Marruecos, y hacía 4 que no visitaban a sus familiares; “me lo he pasado genial jugando con mis primos”, dice. También ha disfrutado en la fiesta del cordero, comiendo cuscús y pinchos morunos. 

Ahora le toca disfrutar de las fiestas, corriendo delante de los cabezudos, y en las barracas. 

TERESA

Teresa Motos Izeta nació y vivió en Donostia, aunque, como su madre era elizondarra, pasó, y hoy en día -aunque viva en Iruñea- también pasa mucho tiempo en Elizondo. Desde jovencita destacó, en el hockey hierba, modalidad a la que dedicó muchos años de su longeva vida deportiva, nada más y nada menos que 20 temporadas en el club de su vida, la Real Sociedad. Su esfuerzo, su dedicación y talento le valieron para lograr muchos títulos a nivel de club, 5 Ligas y dos Copas de la Reina. 

Teresa Motos Ondikol

También fue una fija en la selección española. Durante los 18 años que defendió los colores de la selección, participó en diversos campeonatos internacionales, logrando varias medallas, pero su mayor logro, sin duda, fue la medalla de oro lograda en Barcelona ’92. Quizás el máximo galardón que pueda conseguir una deportista de élite. Motos recuerda el momento, la alegría tras conseguir la medalla, aunque reconoce que ahora lo valora más, “quizá con el tiempo te das cuenta de lo que logramos”. Teresa sigue jugando al hockey, en el Atlético San Sebastián, sigue disfrutando, “jugando a otro nivel”.

Motos recibió la invitación del pueblo para lanzar el chupinazo “con sorpresa”, y aunque está tranquila, “seguro que cuando llegue el momento siento esas cosquillas”. Le “encantan” las fiestas de Elizondo, las ha vivido desde niña, recuerda que “antes te gustaban algunas cosas, los cabezudos, los gigantes, luego de joven vives más la noche, luego pasas a la fiesta de día, con el zikiro, los conciertos… He vivido las fiestas de diferente manera, según la época”. Hoy en día disfruta mucho de la Salve, la misa de Santiago, el zikiro, o el concierto de la Banda Recreo. l