Un año más, miles de personas se acercaron ayer la feria de Altsasu, una cita de origen ganadero con siglos de historia que tiene fecha fija, el tercer domingo de octubre con un matiz, que sea en la segunda quincena. Así, este año era el cuarto domingo cuando los animales volvieron a las calles de la villa. Lo cierto es que el ganado, aunque sea de modo casi testimonial, continúa siendo protagonista con el concurso caballar como acto estrella. Ayer se presentaron 67 cabezas de 20 explotaciones de Sakana, un escaparate del mejor ganado de la comarca. “El nivel ha sido muy alto. El fallo ha estado muy peleado, sobre todo en sementales y en yeguas”, apuntaron Gabriel Orradre y Miguel Andueza, ganaderos de Ascana que formaron el jurado. La mayoría, en torno al 90%, eran de raza Burguete. “Cada vez hay más ganado y más explotaciones”, aseguraron.
Había ocho categorías, desde sementales a potros de un año. Si bien no hay un premio especial para el mejor ejemplar a concurso, destacó Pardo, un semental de 6 años de 860 kilogramos de peso de Martín Ezkurdia que ya hace dos años se llevó el primer premio en su categoría. El segundo fue para Egoitz Lopetegi y tercero Juan Aldaba. En sementales de 3-5 años ganó Patxi Legarra José, Ángel Recalde fue segundo y José Javier Arraiza tercero. En yeguas con cría el primer premio fue para Patxi Legarra, SAT González Percaz se llevó el segundo y el tercero fue para Juan Aldaba. En yeguas sin cría, ganó SAT González Percaz, de Ziordia; Xabier Bakaikoa fue segundo y Javier Aguirre tercero. En potros de dos años, el primer premio fue para SAT González Percaz, el segundo para Juan Aldaba y tercero para Martín Ezkurdia. En ejemplares de un año ganó Agustín Askarai, Martín Ezkurdia fue segundo y Egoitz Lopetegi tercero.
En potras de dos años, el primero fue Fermín Uncilla, Javier Aguirre segundo y Juan Aldaba tercero. En potras de un año ganó Gabriel Abajo, el segundo fue Fermín Uncilla y el tercero Patxi Xabier Astiz. Por último, el premio para el mejor ejemplar de Altsasu fue para Xabier Zelaia.
En vez de trofeos y cheques de dinero, al igual que el pasado año, se repartieron vales a canjear en Piensos Unamuno. Para el primero eran 400 kilogramos, 250 para el segundo y 150 para el tercero.
Asimismo, se pudo ver ganado bovino, 46 cabezas y ovino latxo de cuatro pastores de Altsasu en la zona del ferial.
Sin perder la vista al sector primario, la feria de Altsasu es sobre todo un gran mercado. Por un lado, en Gartzia Ximenez había un mercado de productores agroalimentarios con más de 40 puestos y oferta variada para preparar la despensa de cara al invierno con miel, queso alubias, embutidos o conservas junto a alimentos más perecederos como verdura, pan o repostería. Tampoco faltó la artesanía, con una veintena de puestos en la plaza de Los Fueros además de un mercadillo variado en Baratzakobide. Asimismo, hubo una exposición de herramienta y maquinaria en Santo Cristo de Otadia.
En la feria de Altsasu también hay espacio para la cultura. Por un lado, se celebró la 12ª edición de Arte azoka, organizada por Artebide Taldea en el Centro Cultural Iortia, dónde se pudo adquirir obra de artistas de Sakana e invitados. Asimismo, acogió la séptima edición de la Feria de la Edición de Navarra que organiza Editargi. Después de que el pasado año se estrenara en Altsasu, ayer volvió con nueva ubicación, en la plaza. Y fue un éxito. “Aunque nuestro principal objetivo no es la venta sino que se conozcan los libros que se editan en Navarra, se ha vendido bien”, apuntó Aritz Otazu, presidente de Editargi. Ayer acudieron seis editoriales: Txalaparta, Mintzoa, Pamiela, Eunate, Alkibla y Katakrak.
EXPOSICIÓN MICOLÓGICA
Un acto imprescindible de las ferias de Altsasu es la exposición de setas y hongos que organiza la Asociación Micológica de Alsasua. Ayer se pudieron ver 197 especies. “Hay un poco de todo”, apuntaron desde esta asociación, al tiempo que recordaron que la media suele ser de 250 y algún año casi se ha llegado a las 400. Después de un brote excepcional de boletus la segunda quincena de septiembre, se espera que con las lluvias recientes vuelvan a salir “tímidamente. Hay especie que todavía no han salido”, apuntaron. A las que no les hace falta lluvia para que salgan en el monte es a la basura que encuentran cuando recolectan hongos y setas y que también mostraron ayer.
Otro clásico es el Rally fotográfico de ferias, que este año celebra 35 ediciones, tantas como participantes ayer. Todas las fotos se pudieron ver al final de la mañana en Gure Etxea. Pero un fallo informático impidió saber para quienes eran ganadores. Si se entregó el premio en la modalidad infantil, que fue para Irune Negrero Hualde, de Altsasu. Asimismo, se pudo ver una exposición de fotografías de naturaleza de Antonio Valencia que se mostrarán en Iortia.
