Esta semana se retiraron de las calles de Estella-Lizarra las últimas cabinas públicas de la compañía Telefónica que todavía permanecían en la ciudad. Apenas unas pocas unidades todavía permanecían sin uso en las calles de la ciudad del Ega. La retirada también se llevará en el resto de las localidades de Navarra antes de final de año.
Telefónica está culminando la retirada de las 14.824 cabinas de teléfonos desplegadas en todo el Estado, después de que estas hayan dejado de ser un servicio universal obligatorio.
La desaparición de las cabinas se producirá a nivel estatal de acuerdo con la Disposición Transitoria Novena del anteproyecto de Ley general de Telecomunicaciones. De este modo, la compañía ha ido retirando paulatinamente todas las cabinas siete años antes de que estas cumplan su primer centenario.
La primera cabina telefónica del Estado se instaló en 1928, a finales de los años 20 en la caseta del Viena Park, actualmente denominado como Florida Park, en el parque de El Retiro de Madrid. Se trataba de un aparato que estaba emplazado dentro de un cajetín que se abría para acceder al teléfono.
Telefónica es el operador que está obligado a mantener este servicio tras un concurso convocado por el Ministerio de Asuntos Económicos y de Transformación Digital y que habitualmente queda desierto, ya que ningún operador puja por este servicio.
La última adjudicación se produjo hace dos años, en diciembre de 2019, y expiró el 31 de diciembre de 2021.
