La adjudicación de las 27 viviendas de VPO de alquiler que Nasuvinsa ha construido en el barrio de la Azucarera de Tudela se realizará en verano después de que en junio el Ayuntamiento entregue la licencia de primera ocupación lo que permitirá proceder a su adjudicación según las peticiones que se realicen. Junto al edificio construido ha quedado un espacio vacío en reserva donde, a largo plazo, Nasuvinsa tiene pensado realizar dos nuevas construcciones (de unas 4 alturas para 20 viviendas) y se está analizando si serán de alquiler asequible o cooperativa (o ambos) “para combinar socialmente los espacios y diversificar la población”, explicaron.
La consejera de Vivienda, Begoña Alfaro, ha visitado esta mañana el edificio que se encuentra dentro del plan foral de alquiler asequibles Navarra Social Housing, que se inició en 2016, y ha supuesto una inversión de 4,8 millones de euros. Según ha señalado Alfaro, “con esta promoción cerca del 65% de ese programa ejecutado (337 VPO), quedarían 183 viviendas que se terminaránentre 2024 y 2025”. Pese a haber sido invitados nadie del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Tudela ha acudido a la visita de la consejera y si los dos ediles de la oposición Eneko Larrarte (Contigo Tudela) y Olga Chueca (PSN).
La consejera ha subrayado la importancia de que las personas interesadas en una de estas VPO en Tudela se encuentren inscritas en el censo de solicitantes de vivienda protegida del Gobierno de Navarra, “herramienta única a través de la cual se adjudican todas las viviendas protegidas, sean de promoción pública o privada, en régimen de arrendamiento o de compraventa”.
El edificio cuenta con una gran cantidad de avances en el aspecto medioambiental ya que, como ha señalado el director gerente de Nasuvinsa, Javier Burón, “es un edificio de consumo neto casi cero, con tecnología avanzada para la mayor eficiencia energética y calidad de vida y el hecho de que sea un alquiler asequible no es que no sea de calidad, todo lo contrario. El alquiler será un poco por encima de 5 euros el metro cuadrado”. Según ha indicado Javier Burón, “se cuida mucho la calidad dado que estas viviendas han de estar en servicio durante muchos años, con la vista puesta en que hay que gestionar mantener en buen estado d durante décadas”.
La promoción cuenta con una superficie de 4.967 metros cuadrados en el que se han levantado 27 VPO en sótano, planta baja y seis altura con pisos de 2 y 3 dormitorios (que tienen trastero y garaje) cuya superficie de cada uno de ellos es de 60 metros cuadrados (los pequeños) y casi 90 metros cuadrados (los grandes) y destacan no solo los grandes avances tecnológicos sino también la luz, las vistas y un patio interior con lucernario que ilumina, ventila y comunica las viviendas y que cuenta con un árbol de fuego en el centro (que da flores rojas) y diversos arbustos en una zona interior ajardinada. De las seis alturas en cinco tienen 4 viviendas por planta y en la planta baja tres que tienen espacio exterior vallado de uso privado.
El esquema de patio interior con viviendas perimetrales posibilita que todas tengan salones en esquina disfrutando de dos orientaciones y un esquema de vivienda muy compacto. Las cocinas están comunicadas con el salón y todas las cocinas disponen de un espacio interior para tender.
El edificio ha sido construido según la directiva europea de Edificación de Consumo Casi Nulo y tiene los certificados Passivhaus. La reducción de la demanda energética se hace con medidas pasivas de protección como elevados aislamientos por el exterior, sistemas de protección solar en verano (celosías) y captación de radiación solar en invierno.
Además cuenta con calefacción y generación de agua caliente mediante sistema centralizado de caldera alimentada por biomasa de astillas de madera. Las viviendas disponen también de un sistema de ventilación con recuperador de calor y climatización mediante suelo radiante /refrescante.
El proyecto corrió a cargo del estudio de arquitectura FRPO Rodríguez & Oriol.
Detalles de las viviendas
-Las viviendas son de entre 2 y 3 dormitorios y de unos 60 y 90 metros cuadrados
-El precio rondará los 5 euros por metro cuadrado de alquiler.
-En el piso sexto hay una vivienda en el que se ha dejado un salón más grande con la idea de que el propietario haga otra habitación si necesita. Era la intención en todas las plantas pero al final se ha dejado solo en al última planta.
-Al principio en planta abaja iba a haber locales pero se decidió hacer también vivienda.
-Uno de los arquitectos lo ha definido como “abstracto y austero, algo importante para su relación con la ciudad
-Las ventanas tienen un grosor especial, con tres hojas de vidrio, que elimina gran parte de los ruidos exteriores, incluido el tren.
-Un aparata exterior que mide el aire cierra los toldos de forma automática cuando hay mucho aire.
-Dado que es un edificio muy domotizado, desde Nasuvinsa se controla el consumo que se realiza de las viviendas, tanto de luz, como de agua o calefacción.
