Ha estado tapado para asegurar su preservación y conservación, pero ahora, y después de intensos años de trabajo, los peralteses han podido visitar parte de su patrimonio, en concreto, el yacimiento arqueológico romano Campo de Arlas, un espacio que fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC) por el Gobierno de Navarra y cuya ocupación tiene su origen en el s. I d.C., pero su momento de esplendor lo alcanzó en el Bajo Imperio (s. IV-V d.C.), momento en que se fechan los mosaicos descubiertos y cuyos dibujos describen formas geométricos con elementos vegetales no figurativos.

Esta tarde, y para mostrar los hallazgos que se hicieron en 2003 aunque no fue hasta 2021 cuando, con motivo de las obras de modernización del regadío tradicional de Peralta, se localizaron los restos arqueológicos, la corporación municipal con el alcalde Juan Carlos Castillo al frente, así como Txaro Mateo Pérez y Álex Duró Cazorla, los encargados de dicha intervención, han presentado los primeros resultados y los pasos a seguir.

Jornada de puertas abiertas para que la ciudadanía conociese el yacimiento arqueológico

Tras una permuta, este terreno pasó a ser de propiedad municipal y, en una primera campaña de excavación, exponía Txaro, “en una intervención de urgencia”, se intervino en unos 230 metros y se detectaron dos mosaicos y un tercero de 270 metros cuadrados que está cubierto, uno de los ejemplares más grandes de la Hispania Romana y que creen está más dañado.

En una segunda campaña de excavación, esta ya, una intervención programada, cuyo objetivo es investigar, se evaluó el estado de los mosaicos y se descubrieron por completo junto con otras dos estancias. Y es que, han apuntado, "esto corresponde a un espacio edificado de planta rectangular con una superficie construida de en torno a 4.000 metros cuadrados"

Un Plan director

Ahora, comentaban, además de mantener el perímetro vallado y de colocar un tipo de geotextil sobre el terreno, el Consistorio va a sufragar un invernadero para protegerlo del aire. De acuerdo con Castillo, “se está elaborando un Plan director para definir las fases en las que se tiene que desarrollar este proyecto; no se puede excavar por excavar. Tuvimos una reunión con Príncipe de Viana para ver qué se puede y qué debemos hacer a medio plazo y, de momento, vamos a definir nuestro objetivo final, que es que se pongan en valor y a la vista los mosaicos y que se cubran para que se puedan visitar. Después, el desarrollo lo marcará la capacidad presupuestaria del Ayuntamiento”. 

Además, y para Txaro y Álex, esta construcción, que está a 30 centímetros de la cota y que no se ha deteriorado con las labores agrícolas, “no sabemos a qué corresponde; son hipótesis. Creemos que está relacionada con la trayectoria de una calzada que no aparece en las fuentes clásicas y pensamos que pueden ser unas ventas al servicio de una infraestructura viaria. Campo de Arlas es, por lo tanto, hasta la fecha, el único establecimiento viario conocido en Navarra correspondiente al Bajo Imperio”.