El Ayuntamiento de Burlada celebró esta semana un acto institucional de reconocimiento a las personas llegadas en el último año al municipio, representadas por aquellas que han pasado por el programa de acogida del servicio de Diversidad Cultural y Migraciones.

También se homenajeó a las personas y colectivos que vienen participando activamente en uno de los consejos de participación ciudadana del municipio.

El salón de plenos se quedó pequeño ya que en el mismo participaron más de 125 personas y 27 entidades y asociaciones, además de la representación de toda la Corporación municipal. El acto también fue una reanimación del derecho a migrar, en especial en estos momentos de auge de los discursos racistas y xenófobos que criminalizan a las personas migrantes, señalaron en el acto.

La alcaldesa Berta Arizkun indicó en su intervención que la mejor forma de combatirlos es “construir una Burlada antirracista y solidaria en la que se garanticen todos los derechos para todas las personas, independientemente de cuál sea el origen o situación administrativa”.