La apuesta de Tierras de Iranzu y Guesálaz por formar parte del proyecto Turembalses “pondrá a Alloz y a Navarra en el mapa”, aseguró Charo Apesteguía resumiendo la importancia de formar parte de este grupo que está especializado en el turismo de embalses en el estado. Un ámbito nuevo y ambicioso que establecerá a Alloz dentro de un nuevo circuito nacional junto con seis socios para “impulsar el turismo de aguas interiores” en cinco comunidades autónomas y donde además de Tierras de Iranzu participarán las diputaciones de Lugo, Cáceres y Badajoz, la Asociación para el Desarrollo Integral Sierra Oeste de Madrid y la Mancomunidad Valle Norte del Lozoya.

Se trata de un plan apoyado con fondos europeos cuyo objeto es llevar adelante proyectos de redes de actores “que impulsen o transformen experiencias turísticas en experiencias sostenibles, digitales, integradoras y competitivas, para su posterior promoción internacional”. Y es que la extensión de costa interior es una de las grandes riquezas para impulsar el turismo de calidad, en un estado que posee 1.200 embalses en otros tantos municipios, lo que refleja el dato de que esta línea duplica los kilómetros del Estado en playas

Un nuevo planteamiento que servirá para mostrar “la cultura, el patrimonio y la gastronomía de esta zona”, aseguró Apesteguía, un enclave que tiene pendiente todavía la concesión de la bandera azul, un distintivo que podría llegar a Alloz este mismo verano. 

Con todo, este proyecto deberá estar implantado para este verano pero ya se está trabajando en él y para el que no existe temor de alta ocupación. “La central de reservas del embalse es la que marca la regulación de la entrada y eso está funcionando con la admisión como tope del número de aparcamientos permitidos, algo que no cambiará cuando entre en marcha este proyecto”, aseguró Juan Antonio Urra, alcalde de Guesálaz. “Queremos para Alloz un turismo de calidad que nos ayude en el desarrollo rural a través de un turismo activo que nos ayude contra la despoblación. Si no hay actividad los pueblos morirán”, aseguró Apestaguía. 

El proyecto contará con un presupuesto de casi 800.000 euros de los que en su mayoría provendrán de los fondos Next Generation “uniendo esfuerzos para consolidar un modelo turístico que destaque por su sostenibilidad y capacidad de integrar a las comunidades locales” finalizaron desde Tierras de Iranzu.