Mañana de feria en Etxarri
Amalurra Azoka acercó este domingo a la plaza al sector primario de Sakana con un animado mercado sin intermediarios
Desde que hace unos días se abrieron los pastizales de Urbasa y Andia, los más importantes de Navarra con cerca de 40.000 cabezas de ovino, vacuno, caprino y caballar, el ganado va entrando en estas sierras. Se trata de un pastoreo que se remonta al Neolítico, fundamental para mantener el equilibrio del ecosistema. Ayer subieron varios ejemplares de Etxarri Aranatz, que atravesaron al mediodía el centro de la localidad, dentro de Amalurra Azoka. Y es que esta feria transparente de producto local y artesanía volvió a la plaza con una variada oferta de productos y otras actividades relacionadas con el sector primario, que continúa vivo en una comarca de carácter industrial. Precisamente, para la pervivencia de estas pequeñas explotaciones que trabajan en un modelo sostenible estos mercados son fundamentales, un canal de venta directa que promueve la relación entre el productor y el consumidor.
Por ello, Belardi, asociación que agrupa a una decena de productores de Sakana, puso en marcha en 2012 esta feria, una cita consolidada en el calendario festivo de Etxarri. De hecho, es un día que aprovechan colectivos para visibilizar su trabajo. Ayer salió a la plaza los grupos de Euskaraldia para el reparto de chapas de cara al ejercicio colectivo para activar el uso del euskera que tendrá lugar del 15 al 25 de mayo. También Inklusibitatearen Aldeko Batzordea, que invitó a ponerse las gafas de la inclusividad para cambiar la mirada, y Etxarri Palestina Elkartasun Taldea, que realizó un sorteo de un queso y una mantra realizada en el taller de costura. Asimismo, Juan Luis Larraza puso a la venta sus dos libros, Bernoa y Luis Lizarraga Kapitaina.
La oferta de la feria era amplia, con 25 puestos. De éstos, 15 eran de productos agroalimentarios como queso, el producto estrella, además de verdura de temporada, miel, pan, embutidos, cerveza vino o aceite entre otros. Y es que para ampliar la oferta también acuden productores de otras zonas de Navarra. El resto eran de diferentes artesanías como serigrafía, joyería. crochet o cuero. Tampoco faltó que llevarse a la boca y se pudo degustar pinchos y raciones de cordero asado de corderos de una explotación de Arbizu.
Al igual que en ediciones anteriores, esta feria vino precedida de actividades, con la presentación del libro Haziak y la iniciativa de recuperación de variedades de Arakil el jueves y el viernes mesa redonda sobre experiencias de transformación del territorio y de agricultura sostenible.