El preacuerdo alcanzado entre el Ayuntamiento de Beriáin y Caja Rural, que le permitirá saldar la deuda que mantiene con la entidad financiera que se eleva a cinco millones de euros, ya ha sido formalizado a través de un convenio urbanístico que se encuentra en fase de exposición pública hasta el próximo 15 de septiembre. Un documento que compromete a ambas partes, libera de obligaciones a las arcas municipales superando un viejo contencioso contraido por la sociedad municipal Morelucea y desbloquea el crecimiento del pueblo posibilitando el desarrollo de la unidad US-1 favoreciendo con ello la construcción de nuevas viviendas tanto libres como protegidas. El convenio deberá volver para su refrendo al Pleno del Ayuntamiento a comienzos del próximo mes de octubre. 

Deshacerse de una deuda de cinco millones (3,9 millones más intereses) que supera con creces el presupuesto municipal de un año y el litigio, que viene coleando desde hace casi una década, suponía de facto el mayor quebradero de cabeza para el Consistorio. El pacto consiste en que el Ayuntamiento asume el pago de la urbanización de los terrenos donde Caja Rural tiene opción de construir más de 200 viviendas, y que supone 2,5 millones. A cambio, se cancela la deuda que el Ayuntamiento mantiene con la entidad. Se trata de una doble operación beneficiosa para el Consistorio puesto que paralelamente el Ayuntamiento ha negociado con el Gobierno foral la reconversión de una parcela dotacional inmersa en la misma unidad (US-1) de 7.412 metros cuadrados para uso residencial. Un sector residencial donde también se contemplan alrededor de 19.000 metros cuadrados de zonas verdes. El trazado de aceras e infraestructuras para transformar los terrenos en solares era una actuación que correspondía a Caja Rural. El Ayuntamiento podía exigir además la ejecución de las obras de urbanización de toda la unidad al haber transcurrido el tiempo legalmente establecido. En Beriáin hay una necesidad de vivienda social que se ha demostrado en las últimas encuestas, con más de 750 solicitudes, destaca el primer edil. Se ha negociado con Nasuvinsa la posibilidad de ceder suelo para construir vivienda social. El espacio dotacional que corresponde por cesiones en la unidad propiedad de Caja Rural (ampliación de la US-1) reúne las características necesarias para albergar vivienda protegida y mejora la conexión con la trama urbana. “Queremos potenciar vivienda pública, también en alquiler y para jóvenes, serán para vecinos de la localidad, lo que exige un debate previo”, remarcó. El suelo dotacional tiene capacidad para construir otras 200 nuevas viviendas.

Las obras de urbanización deberán estar finalizadas antes del 30 de junio de 2024.

 Litigio de 2010

Cabe recordar que el Ayuntamiento de Beriáin mantiene un litigio abierto con Caja Rural sobre las garantías de devolución de un préstamo que concedió en 2010 a la sociedad municipal Morelucea para financiar las obras de la segunda fase de una promoción residencial en la zona de las Cocheras. Caja Rural, destaca el primer edil, obtuvo por 600.000 euros unos terrenos “a precio de subasta” al quebrar la sociedad pública y que estaban tasados en cuatro millones de euros (suelo urbanizable). “Una vez ejecutadas las actuaciones contempladas en este convenio el Ayuntamiento de Beriáin y Caja Rural comunicarán al Juzgado de Primera Instancia nº 1 de Pamplona la ejecución convenida de la sentencia de la Audiencia Provincial de Navarra de 29 de septiembre de 2016...”, detalla el convenio cuya resolución de Alcaldía salió a información pública el pasado 18 de agosto.