- El Ayuntamiento de Pamplona estima que dejará de ingresar hasta junio de este año 6,7 millones de euros e incrementar el gasto anual en 2,2 millones de euros como consecuencia de la situación de crisis sanitaria.

Estas cifras fueron facilitadas ayer por la concejala delegada de Servicios Generales, María Echávarri, en la comisión de Presidencia, en la que se ha apuntado la dificultad de aportar estimaciones reales debido a la incertidumbre existente en cuanto a la puesta en marcha de los distintos sectores económicas y a las normativas pendientes.

El Área de Hacienda ha calculado una disminución de ingresos de 2,1 millones de euros mensuales, que alcanzarían la cifra de 6,1 millones hasta el 30 de junio.

La caída de ingresos podría verse compensada en parte, según la concejala, con una subvención extraordinaria del Gobierno Foral de 176.000 euros. También podrían recibir una cantidad todavía sin determinar del fondo extraordinario de 25 millones de euros publicado en BON pero que no se ha materializado.

De forma paralela, se ha producido un aumento de gastos que se han calculado para todo el año en 2,1 millones de euros, especialmente en el Área de Servicios Sociales, donde se estima un aumento de entre 1,8 y 2 millones de euros, principalmente en atención a personas sin hogar (675.000 euros) y en ayudas de emergencia (473.000 euros).

La concejala ha avanzado que las fuentes de financiación para futuras modificaciones presupuestarias suman 20,6 millones provenientes del superávit presupuestario de 2019 (13,2 millones de euros), subvención del Gobierno Foral para ayudas a la emergencia (0,18 millones) y remanente de tesorería para gastos generales y ahorros producidos en las áreas por la no ejecución de programas (7,22 millones). Esa financiación se destinará principalmente al I Plan de Medidas COVID-19 (5,1 millones) y obligaciones pendientes del ejercicio anterior (4 millones).