El gasto de agua en la Comarca de Pamplona ha venido experimentando un descenso paulatino en los últimos años, tanto que mientras que la población han ido incrementándose, la demanda del agua sigue una tendencia claramente decreciente. En las últimas décadas, y según datos de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, "el volumen total requerido por el sistema mantuvo una senda alcista hasta el año 2004, pero a partir de este momento refleja un fuerte decrecimiento, tanto en términos de volumen, como el dato aún más relevante en cuanto a dotación por habitante", señala la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona. Somos algo más conscientes de lo que supone su despilfarro, pero también los sistemas de control de fugas y averías han mejorado considerablemente.
Analizando los últimos 20 años, fue en ese 2004 cuando se alcanza el máximo histórico con un volumen anual de agua inyectada en red de 36,9 hm3, que contrasta con el valor de 2019 (30,34 hm3), en el que se aprecia una cierta estabilizacion, e incluso recuperación. Todo esto ha llevado consigo "que la dotación por habitante haya disminuido en dos decenios en más de 100 litros por habitante diarios, pasando de 330 l/hab. día a los actuales 225 l/hab. día". El estudio de la MCP añade que ese descenso se ha producido "fundamentalmente en base a la reducción de consumos, en tanto la mejora del rendimiento de la red se produjo fundamentalmente en los años años 90".
¿Qué causas han propiciado esta evolución? Por un lado, la "optimización de los procesos industriales y la transformación de la industria local", así como las "instalaciones domésticas más eficientes" y la "optimización y reducción de riegos", y, por otro, el "mantenimiento de las políticas de mejora continua en la gestión de redes" y la "influencia de la crisis económica (año 2008 y siguientes) y recuperación posterior.
Los datos forman parte del Plan de Emergencia de Sequía del Abastecimiento de Agua de la Comarca de Pamplona realizado en los últimos meses por la MCP para actualizar el de 2009. Aunque se considera que en la situación actual no cabría temer un desabastecimiento grave de la población en situación de sequía, el análisis estudia todas las fuentes de suministro y las medidas que tendrían que llevarse a cabo, así como las ordenanzas y el sistema sancionador a modificar en lo que atañe a las obligaciones que debería asumir la población.
En la actualidad, el sistema de abastecimiento de la Comarca de Pamplona comprende 43 municipios y 178 localidades, con una población total de 370.000 habitantes . Para ello, se emplean tres fuentes de suministro: el manantial de Arteta (ETAP Eguíllor), el embalse de Eugi sobre el río Arga y el embalse de Itoiz sobre el río Irati a través del Canal de Navarra.
¿Qué medidas se adoptarían por parte de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona en caso de sequía? El informe recoge que se tendrían que utilizar "en paralelo" dos herramientas. Por un lado, una campaña de comunicación que informe a los usuarios "de forma realista" de la situación, de la previsión de la evolución, las medidas adoptadas, y en segundo lugar, "el "refuerzo legal" que permita la adopción de medidas restrictivas, con su "correspondiente régimen sancionador" y tarifarias, "que reflejen la urgencia de la situación.
Asimismo, en este tipo de situación se aplicaría la reducción de la presión, "una de las medidas con influencia más directa en la reducción del consumo de agua del sistema", así como la restricción de usos. En la Fase 1, de emergencia severa, se restringirían riegos y baldeos, en la Fase II, de emergencia grave, las actividades no productivas, y en la fase III, extrema, se produciría el racionamiento excepcional generalizado.
La sequía de 1995. Para encontrar un episodio de sequía importante en la Comarca en los últimos 60 años hay que remontarse al año 1995. La sequía vino definida por una disminución de precipitaciones en verano que siguió en septiembre y octubre. Desde el 31 de octubre se decidió adoptar medidas extraordinarias. Se prohibió el uso de limpiezas y baldeos y riegos agrícolas. Duró hasta el 14 de diciembre.
Manantial de Arteta. Es empleado para el abastecimiento a Pamplona desde 1895. Las aguas de este manantial son tratadas en la ETAP de Eguíllor. Es un manantial karstico y como tal presenta fuerte variabilidad en sus aportaciones. Sus valores ordinarios van desde 300 l/s. hasta más de 20.000 l/s. Su uso prioritario es el abastecimiento de la Comarca. Tiene unas características "muy estables" en cuanto a calidad del agua, por lo que en periodo de sequía no se prevén afecciones. Al tener un comportamiento fluvial, un descenso de precipitaciones produce cambios rápidos de caudal.
Embalse de Eugui. Ubicado al norte de la Comarca de Pamplona embalsa las aguas del curso alto del Arga y tiene una capacidad de 21,4 hm3. La explotación de Eugui emplea las tomas superior e intermedia (cotas 620 y 610) y "no se tiene experiencia constrastada de la calidad del agua por debajo de esta toma".
Canal de Navarra-Itoiz. El abastecimiento se realiza a la ETAP de Tiebas. En situación de sequía, el informe indica que "cabe esperar un incremento de la temperatura" del agua "al discurrir a cielo abierto" y "de la presencia de algas". Según el Plan de Sequía 2018, el embalse de Itoiz mantiene una "reserva para abastecer Pamplona de 12,11 hm3".
