Hace a penas unas semanas que los promotores del antiguo plan Artiberri II, que se inició hace más de una década pero fue paralizado por la crisis, decidieron reactivarlo y ultiman los detalles para llevar a cabo la adjudicación de las obras. Se trata de 1.424 viviendas (de las que 432 serían protegidas) ubicadas entre Artica y Artiberri, en la Cendea de Berrioplano, que correrían a cargo de los propietarios del sector Etxebakar. El Consistorio y varias constructoras forman parte de la junta de compensación en unas obras que contemplan, además, una zona verde de 100.000 metros cuadrados destinados al ocio, los itinerarios peatonales y los parques.

Precisamente la ejecución de este espacio, por valor de 3,5 millones de euros, ha sido la cuestión que ha debatido este martes por la tarde la corporación municipal del Ayuntamiento de Berrioplano en un pleno extraordinario en el que el único punto del orden del día pedía resolver el convenio de estos trabajos, que se firmó en febrero de 2010 y que incorpora un cambio porque las obras del parque San Cristóbal, que iba a llevar a cabo el Consistorio, se integraránn en el proceso de contratación y ejecución de los trabajos de urbanización del sector Etxebakar, que correrán a cargo de las promotoras.

El presupuesto fijado para la totalidad de la obra ronda los 16,3 millones de euros. Se desconoce todavía el plazo de inicio de los trabajos, aunque una vez retomados los trámites iniciales los promotores podrán comenzar a la mayor brevedad posible, dado que se trata de una iniciativa que viene a responder a la escasez de suelo urbanizable en Pamplona y sus aledaños tras el desarrollo de zonas como el Soto de Lezkairu o Erripagaña.

Una vez que comiencen, el plazo de ejecución será de 18 meses, y desde el Consistorio esperan que las obras comiencen "ya en septiembre" aunque todavía hay que adjudicar el proyecto. "Es algo muy positivo, tenemos interés en que no se demore y por eso lo hemos aprobado ahora. Es una urbanización que va a ser un plus para el Ayuntamiento a nivel económico. Ahora estamos en torno a los 7.000 habitantes y pasaremos a los más de 10.000, va a ser algo positivo para el municipio y cuenta con la unanimidad de todos los grupos", ha valorado el alcalde, Raúl Julio Bator (Navarra Suma).