ayegui - El representante del sindicato ELA en Tierra Estella, Juan Larraia, denunció ayer la situación “insostenible” de los trece trabajadores del complejo deportivo Ardantze de Ayegui y criticó la actual gestión de la junta de Gastizun, sociedad pública municipal detrás de las instalaciones desde 2014, que actualmente preside el alcalde de la localidad, Juan Mª Yanci (Ayegui Unido).

Larraia aseguró, en una rueda de prensa a la que asistió junto con el delegado de personal de la empresa, Inti Nehuen Hernández, que la deuda de Ardantze es “ficticia” y que el Ayuntamiento alude a ella con el fin de “cambiar las condiciones del convenio laboral de los trabajadores”.

El representante sindical puntualizó que no se trata de una deuda sino de un “agujero contable” del que económicamente “tiene que responder el Ayuntamiento”, aportando la parte que no tenga Gastizun. “Gastizun en sí misma no genera más dinero que las cuotas y estas no son suficientes”, afirmó. “Esas aportaciones tenían que estar presupuestadas y no lo están desde el año 2014. Y ahora el Ayuntamiento se está echando las manos a la cabeza. Nos preguntamos dónde está ese dinero”.

Según los empleados, el déficit de Ardantze es “menor” que antes de la creación de la sociedad pública, “incluso después de asumir el albergue, la cubierta de la piscina y la nueva maquinaria”. Lamentan que muchas actividades se hayan dejado de ofrecer en los últimos meses por tener en cuenta únicamente su rentabilidad y no el servicio que ofrecían, como es el caso de las sesiones con Anfas o con escuelas.

Convenio Como se recordará, en la junta general de principios de este mes se aprobó anular el convenio laboral de la plantilla por estar “basado en datos irreales” y para “equilibrarlo al estado de las cuentas”, según el alcalde. ELA explicó ayer que la inaplicación unilateral, a pesar de estar contemplada en la Reforma Laboral, contradice lo firmado entre Gastizun y los empleados de Ardantze. “El convenio lo hicimos en su día para tener total garantía de que esto se evitaba; se puede abrir una mesa de negociación, pero nunca actuar unilateralmente. Por eso nos resulta extraño que el Ayuntamiento diga que va a inaplicar, cuando no hay formato legal que se lo permita”.

Larraia añadió que los empleados conocieron de esta decisión por la prensa y también a través de una reunión “en la que dijeron que se trataba de una renegociación, pero quedó claro que el convenio tenía que desaparecer. Se habló de sanciones, despidos y cierre de instalaciones”. Ante esto, la plantilla tiene claro que hará valer el convenio, “que es Ley, hasta las últimas consecuencias: si incumplen, tendremos que denunciar y llevaremos a cabo movilizaciones y huelgas”.

El representante sindical denunció que “se culpabilice a los salarios de la mala gestión” y negó que sean elevados con respecto al sector ya que, aseguró, a excepción de la gerencia los empleados de Ardantze perciben como máximo 1.400 euros brutos al mes. Añadió que el Ayuntamiento acumula una deuda de 12.000 euros con la plantilla por los atrasos del convenio de 2017.

comunicado a usuarios Los empleados de Ardantze enviaron una nota a sus usuarios exponiendo su situación y pidiendo disculpas por los desajustes “producidos por causas totalmente ajenas a nuestra responsabilidad”. Les describieron la gestión de Gastizun como “pura especulación económica” y la de la nueva gerencia como “desidia y dejación de funciones. Esto afecta negativamente al desarrollo normal de las actividades y si no han sido de mayor calado es por la implicación y dedicación de la plantilla. En pago a esta implicación recibimos desregulación de calendarios, turnos y horarios; amenazas; sanciones; impagos, etc”.