- Tras los desprendimientos de rocas del pasado verano, el Ayuntamiento de Estella-Lizarra ha preparado un proyecto de protección para el talud de Zalatambor que proteja tanto a los vecinos del barrio como a los transeúntes de la NA-1110 a la altura del túnel de Fortunato Aguirre. El pasado 26 de agosto varios fragmentos del talud cayeron sobre el asfalto cruzando toda la carretera sin que impactaran sobre peatones o vehículos. El mayor de estos desprendimientos tenía un tamaño de 65x35 centímetros e impactó contra el asfalto de la NA 1110. La actuación de Policía Municipal hizo entonces que se acordonara la zona para prohibir el paso a los peatones, aunque enseguida se reanudó el tráfico rodado. Aquel suceso hizo que el ayuntamiento tomara cartas en el asunto con el fin de evitar futuros desprendimientos.

El alcalde de Estella-Lizarra, Koldo Leoz, informó que el arquitecto municipal Javier Caballero, ha redactado un informe para la realización de un proyecto de consolidación del talud de Zalatambor cuyas paredes dan a la antigua carretera de Pamplona y a la zona del Túnel. El proyecto consistirá en la instalación de una maya de gran contención que complete la zona ya cubierta y "en la parte inferior una zanja con un rebajamiento que tenga también una protección vertical" afirmó Caballero. Un proyecto que alcanzaría un presupuesto aproximado de unos 83.000 euros más impuestos y que debería ser asumido también por el Obras Públicas "ya que entendemos que las competencias se encuentran compartidas", afirmó Caballero. Con todo, el arquitecto municipal aseguró que las grietas que se observan en el talud son normales "como en todos los taludes hay grietas y zonas firmes" y que tras las observación del mismo por geólogos y bomberos se podría decir que "no hay riesgo inminente de nuevos desprendimientos".