Fiestas de Peralta: día para ponderar a los mayores
La localidad celebra el Día del Abuelo con una comida para 300 personas en el frontón - Homenaje a los matrimonios que han celebrado las bodas de oro o de diamante en 2020, 2021 y 2022
El tercer día de las fiestas patronales de Peralta tuvo a unos protagonistas muy, muy especiales: las personas más mayores del municipio. Y es que, si antes de la pandemia el Día del Abuelo tenía mucho sentido ahora, exponían, lo tiene mucho más al haber sido uno de los sectores más castigados durante estos difíciles años.
Precisamente la parroquia de San Miguel acogió pasadas las 13.30 horas una eucaristía en su honor y, acto seguido, los allí presentes acudieron al frontón para disfrutar de una suculenta comida a base de fritos variados, gambones a la plancha, merluza, sorbete, cordero y postre que sirvieron los miembros del catering del Restaurante Marisol.
300 comensales participaron en este acto cuya sobremesa estuvo amenizada por el grupo Azabache y en la que reconocieron, tal y como marca la tradición, a los matrimonios más longevos, en este caso a los que celebraron su especial aniversario tanto en 2020 y 2021, como en este 2022.
Las bodas de oro las han alcanzado Juan Zábal y María Alicia Rubio, Miguel Ángel Irigaray y María Ascensión Gogorza, Juan José Castillo y María Josefa Casarejos, Miguel Balduz y María Isabel Miguel, José Luis Indart y María Adoración Calvo, Andrés Rodríguez y María Dolores Busto, Antonio Pérez y Daria De Abajo, Miguel Ángel Alonso y María Corpus Ruete, Juan Santiago y Ana Mª Busto, Ignacio Legaz y Teresa Martínez, Antonio Castillo y María Teresa Huarte, José Mª Osés y María Esther Zábal, Marías Guindulain y Mª Ángeles Azcona, Juan José Moreno y María Esther Calvo, Félix Moreno y María Josefa Bermejo, Fco. Javier Falcón y María Ascensión Ciordia, y Justo Resano y Rosario Osés.
Mientras que las bodas de diamante las han festejado estos años Indalecio Gil y Esther Soto, José Luis Orduña y Ángeles Osés, Andrés Balduz y María Jesús Ezpeleta, Antonio Pascual y Juana Mª Malo, y Marino Moreno y Josefa Rubio.
Vuelta a la normalidad
El presupuesto para estos días, tal y como explicaba la edil de Festejos Mª Pilar Orduña, es de 350.000 euros, una cifra que ha crecido algo con respecto al año 2019 sobre todo por las partidas de orquestas y espectáculos taurinos.
Aunque el programa mantiene los ejes principales también introduce importantes novedades como las actividades que han organizado para los vecinos de entre 11 y 15 años aproximadamente. Y es que, de acuerdo con Orduña, era un sector de la población que se quedaba un poco en tierra de nadie “porque ni son niños ni son todavía lo suficientemente mayores como para ir a otros actos. Aunque habrá que seguir mejorando, hemos tratado de paliar un poco esa ausencia de actividades”.
Para ello, estos dos días han tenido un camión con juegos virtuales y hoy tendrán una fiesta joven con los DJs David Goñi y Antxon Saéz en la carpa municipal en la que, además, habrá atracciones especiales y cena.
Por otro lado, hay dos días en los que han cerrado una trashumancia infantil y la Asociación Mujeres Piedra Alta, por primera vez, le hará una ofrenda a la patrona; será hoy a las 12.30 horas y acto seguido habrá un lunch.
A Mª Pilar, por otro lado, desvelaba, le hubiera gustado organizar una cena popular con gente de entorno a los 50 años ya que, aunque hay una noche con música de los ‘80 y ’90, “se queda un poco escaso. Es algo en lo que trabajaremos para el año que viene”.
Y es que, aunque está a punto de concluir la legislatura, con la pandemia de por medio, apenas ha podido organizar unas fiestas con calma. “Esta vez veíamos que se iban a poder hacer cosas pero tampoco ha sido un año al uso. La espina que tengo clavada, y que espero quitarme, es la de organizar una reunión con asociaciones y vecinos de diferentes edades e ideologías para mejorar y para tener diferentes miradas sobre estos días”.
Con las fiestas ya encauzadas, la concejala solo espera “que salga todo de maravilla y que la gente disfrute muchísimo porque la vida son dos días. Estos últimos han sido los años más tristes que recuerdo en el Ayuntamiento, han sido muy agobiantes porque no parábamos, pero parecía que no hacíamos nada; solo prohibir. Ha sido muy duro”.