pamplona - Si la ordenanza busca hacer al peatón protagonista de la movilidad, la bicicleta adopta claramente el papel de coprotagonista. Las y los ciclistas deberán circular por la carretera o por carriles bici y ya no lo podrán hacer por aceras, que quedan exclusivamente para los peatones. Además, las bicicletas tendrán que circular por la parte central del carril, preferentemente por el derecho cuando existan dos carriles o más en la vía. Cuando solo exista uno, lo deberán seguir haciendo por la parte central y no por el extremo derecho.

Los vehículos a motor que quieran adelantar a una bicicleta deberán hacerlo cambiando de carril y dejando un margen de 1,5 metros. No podrán hacerlo cuando ambos vehículos circulen por una vía con un único carril. Los ciclistas podrán circular, además de por calzadas y carriles bici, por calles residenciales, parques fluviales y paseos de la capital navarra, y solo podrán hacerlo por las aceras los ciclistas menores de 14 años.

Otro de los cambios sustanciales en su circulación es que en los pasos de cebra habilitados para ciclistas, los usuarios de bicicletas ya no deberán parar y echar un pie a tierra, como estaba estipulado hasta ahora. Con el nuevo texto, deberán cerciorarse de que son vistos y cruzar pedaleando. En los pasos que no estén habilitados para ciclistas, en cambio, deberán bajarse de la bicicleta y cruzar andando. Las bicicletas podrán acceder a los ascensores urbanos, en el número que se estipule en cada uno.

El texto prevé la creación de semáforos exclusivos para ciclistas (con luz amarilla intermitente), en las zonas que dictaminen las diferentes áreas municipales. Además, la nueva ordenanza obliga al Ayuntamiento de Pamplona a crear un registro voluntario de bicicletas para prevenir robos. - I.Z.