PAMPLONA. El alcalde de Pamplona, Enrique Maya, ha considerado que la decisión del TSJN de anular la valoración del euskera como mérito para cualquier puesto en las zonas mixta y no vascófona de Navarra es "lógica" y ha considerado que "se estaba haciendo un auténtico abuso tanto en las oposiciones como en otras cuestiones como cartelería".

Enrique Maya ha señalado, a preguntas de los periodistas al término de un acto, que "cuando se quieren hacer cambios en la normativa del euskera sin cumplir la ley del euskera y la zonificación lingüística ocurren esas cosas".

El alcalde ha explicado que él defiende "la tesis de que el euskera hay que hablarlo de manera voluntaria, el que quiera, que pueda hacerlo, y el que no, que no lo haga, y que esto se haga de manera proporcionada, según estemos en zona vascófona, mixta o no vascófona".

Así, ha dicho que le parece "bien" la sentencia del TSJN "porque se estaba haciendo un auténtico abuso tanto en las oposiciones como en otras cuestiones como cartelería".

Maya ha explicado que, una vez pasado el próximo pleno, confía en poder llevar a la siguiente sesión plenaria una propuesta de modificación de la vigente ordenanza municipal del euskera, que ha considerado "un despropósito". "Es totalmente exagerada en relación a la demanda real que hay de euskera", ha señalado.

"QUE CUMPLAN LA SENTENCIA" Navarra Suma ha calificado de "claro varapalo" a la política lingüística del anterior Gobierno la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Navarra y ha pedido al Ejecutivo foral que "acate" y "cumpla" la sentencia.

En rueda de prensa, los parlamentarios de Navarra Suma Juan Luis Sánchez de Muniáin y Marta Álvarez han calificado de "sectario" el decreto foral del euskera elaborado por el Gobierno anterior, y "ahora además ilegal". "Rompía la igualdad de oportunidades de los ciudadanos y lo confirman los tribunales de Justicia", ha dicho.

Álvarez ha señalado que la sentencia declara "nulos de pleno derecho los artículos que establecen la obligación de rotular en bilingüe edificios, oficinas, sedes, vehículos, uniformes y folletos informativos del Gobierno de Navarra dirigidos a toda la población, así como la señalización viaria de la red de carreteras".

Ha añadido que también "declara nulos de pleno derechos los artículos que obligan a valorar como mérito el euskera en la zona mixta y no vascófona y en los servicios centrales de la Administración, por ejemplo los puestos en los servicios del CHN, los servicios de comunicación y difusión del Gobierno".

Según ha dicho la parlamentaria, "esto es fundamental porque atacaba la igualdad de oportunidades en el acceso a la función pública ya que las personas que hablan euskera siempre iban a tener ventaja respecto a la gran mayoría de la población navarra que no es vascoparlante".

Ha señalado Marta Alvárez que esta sentencia no significa que el euskera no se pueda valorar como mérito, "sino que el decreto establecía la obligación de valorarlo como mérito". "La sentencia lo que hace es corregir esa imposición por parte del Gobierno", ha comentado, para señalar que "la normativa anterior a este decreto ya permitía la valoración como mérito del euskera, lo que no hacía era imponerlo".

Por su parte, Juan Luis Sánchez de Muniáin ha indicado que "se demuestra que ésta era una política sectaria y excluyente de la mayor parte de la población". "El Gobierno hacía ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda; de primera aquellos que hablan euskera, que en el uso es un 7 por ciento de la población, y quedaba excluida el 83 por ciento restante", ha expuesto.

Ha manifestado que el Gobierno "debe acatar y cumplir de inmediato la sentencia" y ha añadido que se genera "una situación caótica" dentro del Ejecutivo por su conformación. "El recurrente es UGT, que viene a defender los mismos argumentos que el PSN, pero el demandado es el departamento de Ana Ollo, que sigue al frente de la política lingüística del Gobierno de Navarra", ha expuesto, para señalar que "el demandante y el demandado prácticamente conviven".