pamplona - La unidad de barrio de Lezkairu abrirá el próximo 2 de marzo, estará ubicada en el edificio del antiguo colegio José Vila y dará cobertura también al vecindario de Santa María La Real. Será la decimotercera sede de los servicios sociales de base municipales de Pamplona, después de que queden de nuevo abiertas al públicos las unidades de Milagrosa y San Juan los próximos 17 y 24 de diciembre tras las obras de rehabilitación.

La concejala delegada de Servicios Sociales, Acción Comunitaria y Deporte, María Caballero, afirmó ayer que la apertura busca "la mejora de la cobertura de recursos a disposición de la ciudadanía", pues tanto Lezkairu como Santa María la Real dependían de la unidad de barrio de la Milagrosa (calle Río Irati). Junto a Caballero compareció la directora de Servicios Sociales, Olivia Elizari.

Con la apertura de la nueva unidad, el área espera descongestionar la atención en Milagrosa "una de las que mayor número de atenciones ha estado realizando". De esta forma afirmó Caballero se "dará una respuesta más ágil y se descentralizará la atención" para "favorecer la igualdad de oportunidades al margen del lugar donde se resida". El nuevo centro de Lezkairu contará con seis personas empleadas (personal administrativo, técnico de integración social, trabajadores o trabajadores sociales), con una inversión en contratación de 220.000 euros, un 50% financiados por el Gobierno de Navarra. El acondicionamiento del espacio, expresaron desde Servicios Sociales ha tenido un valor de 20.000 euros.

María Caballero anunció también que Servicios Sociales está tratando de reubicar la unidad del barrio del Casco Viejo, ahora ubicada en la calle Jarauta 43. El local, dijo la edil, "no está en las mejores condiciones" y sostuvo que las actuaciones podrían ser hacia "tener un nuevo espacio, una ubicación mejor o en cualquier caso dignificar el sitio".

cambios en la atención Más allá de nuevas aperturas, Navarra Suma anunció ayer que el área de Servicios Sociales plantea cambios que "van más allá" de la reducción de las listas de espera, dijo la directora Olivia Elizari. La reducción de los tiempos de espera preocupa, afirmó Elizari, "porque es perder calidad en la atención al ciudadano". Desde meses atrás los grupos de la oposición vienen pidiendo la reducción de los tiempos de espera en las unidades. En el caso del PSN, el 11 de octubre solicitó al área que se estudiara la situación específica de cada unidad de barrio", ante el aumento de las semanas de espera.

No obstante Elizari remarcó que su área ha abierto "una evaluación del sistema, vamos a estar durante un año evaluando el modelo", que puede abarcar "un cambio hasta de definición de los programas", dijo, precisando la necesidad de que "el sistema tiene que ser sostenible" Y que los cambios deberán entrar dentro del marco que engloba a los Servicios Sociales. "Podemos ser creativos pero con un margen", concluyó Elizari.

Acceso a los Servicios Sociales. Las unidades de barrio son la puerta a los servicios sociales de Pamplona. En ellas se desarrollan 4 programas: Acogida, Promoción, Incorporación y Atención a la Infancia. La oposición pidió la reducción de las esperas. En su declaración, el PSN precisaba las unidades de barrio con tiempos de espera más altos. En Milagrosa, dijeron los socialistas, el programa de Acogida aumentó de 2,65 a 6,6 y en Rochapea el mismo programa pasó de 3,05 a 8,2.