ientos de personas participaron ayer, en el barrio pamplonés de la Rochapea, en una concentración en la que, bajo el lema 'Black Lives Matter', se rechazó el "racismo estructural e institucional". La movilización fue convocada por África Unida, Flor de África, EH 11Kolore, Karabana Mugak Zabalduz, Papeles y Derechos Denontzat, Iruñea Ciudad de Acogida y SOS Racismo, y tuvo lugar en Marcelo Celayeta, en el lugar donde fue detenido Elhadji Ndiaye, ciudadano senegalés que falleció posteriormente en dependencias policiales.

Los asistentes se pusieron de rodillas y con el puño en alto, un gesto contra el racismo que se ha extendido en las diferentes movilizaciones en protesta por la muerte en Estados Unidos de George Floyd a manos de la policía de Minneapolis. En un comunicado, los convocantes afirmaron que la muerte de Floyd en una detención "extremadamente violenta", "vuelve a poner de manifiesto la expresión más atroz de un racismo estructural e institucional que no cesa, que es insoportable, que no toleramos y frente al que nos levantamos con indignación y rabia". "La imagen de su cuerpo violentado, tendido en el suelo, clamando auxilio, se suma a las miles de imágenes de violencia que atraviesa las vidas y los cuerpos de personas racializadas, que siguen categorizadas y empujadas a los múltiples márgenes que el sistema diseña para seguir justificando la opresión y el supremacismo".

Imágenes que "traen a nuestra memoria las de otra detención", la de Elhadji Ndiaye, quien falleció posteriormente en dependencias policiales. Al respecto, criticaron los "silencios, justificaciones, intentos de archivo de su causa. Un silencio atroz de un sistema que nos quiere callados, cómplices y víctimas, sin derechos", censuraron. "Es este sistema, representado por las instituciones, el que nos sigue etiquetando, categorizando y dividiendo, condicionando nuestros derechos a nuestro origen, género y racialización, creando espacios donde poder experimentar con los límites normativos y la exclusión".

"Hasta hace pocas semanas la movilidad en estas calles estaba restringida para controlar una pandemia", y recordaron que "la movilidad y la libertad de las personas migradas y racializadas están restringidas de múltiples maneras todos los días del año; a través de un racismo institucional que toma forma de Ley de Extranjería y necropolítica migratoria, de obstáculos en el acceso a derechos fundamentales, controles de identidad racistas, que se convierten en antesala de detenciones violentas, internamientos en los CIE, expulsiones o la propia muerte". "Nuestro grito hoy se une al de todas las personas que se levantan contra el racismo estructural, el colonialismo, el supremacismo de quienes quieren seguir manteniendo un orden mundial basado en la jerarquización del poder".