Las 50 atracciones que llenan el Parque de la Runa de alegría y jolgorio se despediden hoy de Pamplona. Con el tiempo a favor, la Noria ha girado para mostrar al viajero la ciudad desde las alturas, el Gusano ha sido una de las más solicitadas para disfrutar en familia, el Gigant Max ha elavado a la juventud a 40 metros, el Toro Rodeo ha zarandeado a los más valientes, el Tecnodance ha subido y bajado al pasajero a ritmo de la música reguetonera y los míticos puestecillos de comida como la Divina Patata Asada, la churrería el Artesano, los helados Mendoza, la mesón Santana, el kebab González o el Vino Anejo han aromatizado el recinto con la esperanza de volver el año que viene para celebrar los Sanfermines en condiciones.

“Teniendo en cuenta la situación que estamos viviendo, las dos semanas de feria no han ido mal. Es verdad que no es lo mismo que cuando hay una fiesta oficial, pero por lo menos hemos podido trabajar”, ha afirmado José Alonso, dueño del Vino Anejo.

Débora Castillo Godoy, trabajadora de la Divina Patata Asada, ha confesado que la gente ha acudido a pesar de tener un horario limitado y hacer mucho calor en varios días. “Al vender comida caliente, las altas temperaturas nos han perjudicado en momentos puntuales. Eso sí, a partir de las 19.00 horas cuando el sol bajaba las ventas se incrementaban de forma notoria”, subrayó Castillo.

José Alonso también se suma a la idea: “Cuando nos ha caído algún chubasco a media tarde yo lo he agradecido. Al fin y al cabo, si hacía mucho calor la gente no venía o aparecía muy tarde, y eso a nosotros no nos interesaba porque teníamos que cerrar el puesto para las 22.00 horas”.

Las expectativas

Los feriantes coinciden en que su futuro más cercano es incierto ya que no tienen nada previsto para los próximos meses. “No tenemos siguiente destino porque no hay nada seguro. Dependemos del número de contagiados que haya en la ciudad a la que vayamos acudir y de las autoridades”, explica Alfonso Álvarez Alonso, propietario de Toros Rodeo. Y continúa: “Yo intento ser positivo. ¡Ojalá salgan nuevas fechas y nos podamos desplazar!”.

Alonso, por su parte, lanza un mensaje claro y directo: “Aquí cumplimos el aforo, la desinfección y las distancias. Por lo tanto, feriar es más seguro que ir a un supermercado o andar en metro”.