Iruñea Antitaurina ha criticado que las propuestas acerca de un debate sobre las corridas de toros en Pamplona se hayan rechazado en la Mesa del Encierro.

De las 118 propuestas presentadas por la ciudadanía en el buzón de sugerencias de cara a los Sanfermines abierto por el Ayuntamiento de Pamplona, ocho eran propuestas que ahondaban en el rechazo a las corridas de toros y en la necesidad de un debate en torno a ello en la ciudad y doce eran protaurinas. "Hemos conocido que las propuestas contrarias a las corridas de toros se llevaron para debatirlas a la Mesa del Encierro y se rechazaron. ¿Con qué motivo? ¿Por qué este tema se enmarcó en la Mesa del Encierro? ¿Por qué han tomado esta decisión si la Mesa del Encierro es un órgano que se dedica solamente a cuestiones técnicas del encierro?", se pregunta esta agrupación.

"Desde Iruñea Antitaurina consideramos que la necesidad de abordar un debate en nuestra ciudad sobre los Sanfermines del futuro y las corridas de toros no corresponde a la Mesa del Encierro, sino que trasciende a ella. En dicha Mesa participan los ganaderos y la entidad organizadora como es la Casa de la Misericordia, por lo que han primado sus intereses económicos, cuando en realidad su función consiste en valorar las cuestiones técnicas del encierro junto a policías, servicios de emergencias, carpinteros que ponen el vallado, etc, por lo que consideramos que esa Mesa no tiene legitimidad alguna de rechazar las propuestas ciudadanas", exponen.

En la intervención del martes en la Mesa de los Sanfermines Iruñea Antitaurina presentó los datos de un estudio de la Fundación BBVA que concluía que el 80% de la ciudadanía del Estado español rechaza las corridas de toros, y otra encuesta de Electomanía que mostraba que el 68,3% de la población navarra no está a favor de las corridas y el 51% hasta las prohibiría por Ley, datos que apuntan a que el rechazo a las corridas de toros es creciente en la sociedad navarra y a nivel estatal.

Entre los años 2007 y 2019 las corridas de toros disminuyeron un 63,4% en el Estado español, y antes de la pandemia, en 2019, solamente torearon el 18,26% de los toreros y sólo el 26,69% de las ganaderías de lidia vendieron algún animal para ser lidiado.

"Debemos de mirar al futuro y debatir entre todos y todas el cómo serán los Sanfermines del futuro, ya que es una decisión importante para la ciudad que no la pueden tomar las personas y los intereses que están en esa Mesa del Encierro", enfatiza Iruñea Antitaurina.

El alcalde de Pamplona, Enrique Maya, contestó ayer aludiendo a la "libertad" de asistir de ese 20% de la población a la que le gustan, sin embargo, desde Iruñea Antitaurina consideran que esa "libertad" es la libertad para maltratar y torturar a un animal. "Porque no se puede obviar que en las corridas a todos los toros se les clava la puntilla. Instrumento prohibido para dar muerte a los bóvidos en los mataderos por la Organización Mundial de la Salud Animal desde el año 2006, por considerarlo cruel e inhumano".

Por otro lado, Maya también contestó que cree que no se puede separar el encierro de las corridas. Desde Iruñea Antitaurina defienden que esa es la opinión del primer edil y que dependerá de la voluntad de la ciudadanía. "Hay que acabar con el maltrato animal y con la extrema crueldad de las corridas de toros porque la tortura y la muerte de animales no puede ser la base de nuestras queridas fiestas. La ciudad debe abordar el debate de los Sanfermines del futuro", concluyen.