os visitantes del parque temático podrán disfrutar a partir de hoy de un original viaje en una locomotora de vapor, reproducción a escala de la época. El Centro de Interpretación del Ferrocarril y de las Vías Verdes de Trinitarios, más conocido como el parque del tren, abre sus puertas al público ofreciendo a los visitantes un recorrido por el circuito confeccionado en el recinto. Ayer el alcalde de Pamplona, Enrique Maya, inauguró este espacio, que se ha desarrollado en colaboración con la Asociación Navarra de Amigos del Ferrocarril (ANAF). Su presidente, Ángel Osácar, explicó las instalaciones y la maquinaria al alcalde y los miembros de la corporación que acudieron a conocer el parque.

El proyecto pretende acercar a la ciudadanía la historia del ferrocarril en Navarra, prestando especial atención a las vías verdes que recorrían las Comunidad foral y que tenían en Pamplona su punto neurálgico. Estará abierto hasta el 11 de septiembre, de martes a domingo, de 18 a 20 horas. Los visitantes podrán realizar un recorrido en un tren real de vapor en los primeros días, y en tres más actuales después. La experiencia, abierta a todos los públicos, llevará a los viajeros a través de túneles, puentes y taludes durante unos cinco minutos. El coste de la entrada es de 1,5 euros para menores acompañados y 2,5 euros para el resto.

Ésta es la primera fase del proyecto, que tiene previsto poder abrir en septiembre una biblioteca especializada en trenes y, de cara a Navidad, una sala de exposiciones.

El espacio, de 6.740 metros cuadrados, dispone también de un edificio de cocheras, para guardar las locomotoras, y un edificio principal, simulando la estación, donde se ubicará la zona expositiva, la biblioteca y un espacio multiusos, donde se prevé dar charlas a los escolares que acudan de visita. El recinto cuenta, además, con una zona de plato giratorio, donde descubrir distintas locomotoras, eléctricas, de vapor, de gasolina y hasta una quitanieves.

El Ayuntamiento firmó en noviembre del año pasado un documento administrativo con la Asociación Navarra de Amigos del Ferrocarril. El plazo de concesión es de 15 años improrrogables, con una aportación económica anual por parte del Ayuntamiento de 16.600 euros.

Entre otras actividades, se prevé organizar cursos de conducción de maquinista, exposiciones de maquetas modulares, cursos de restauración de material ferroviario, cursos de maquetismo, digitalización y electricidad, o charlas especializadas. ANAF confía en que se convierta en un punto de divulgación y conocimiento sobre la historia de Navarra vinculada al tren, para estudiantes y mayores.