san adrián - La nueva biblioteca de San Adrián, uno de los proyectos más esperados y ambiciosos de los últimos años, abrirá sus puertas al público mañana en el antiguo centro de salud, lugar al que también se han trasladado las dependencias de la Policía Municipal.
Se trata de un espacio de unos 400 metros cuadrados que se ha rehabilitado por completo y en el que se han creado dos áreas diferenciadas; una para adultos y otra para niños.
La nueva biblioteca de San Adrián, además, cuenta con 71 puestos de lectura (46 para jóvenes y personas mayores y 25 para los más txikis del municipio). Este lugar también dispone de una zona de hemeroteca, un espacio que alberga documentos audiovisuales, cinco ordenadores para consulta Internet y el catálogo de la Red de Bibliotecas de Navarra, y una sala multiusos en la que se podrán realizar charlas y trabajos en grupo.
Durante los dos últimos meses la biblioteca municipal ha permanecido cerrada ya que los trabajos se han centrado en el traslado y etiquetado del fondo documental, más de 17.000 ejemplares, del viejo edificio al nuevo.
Y es que hasta ahora la biblioteca estaba ubicada en el sótano de la casa de cultura, un lugar inadecuado y “poco digno”, tal y como comentaba en su día el edil de Cultura, Jesús Sola, puesto que, entre otras cuestiones, no tenía luz solar. De hecho, hubo un grupo de vecinos, miembros muchos de ellos del club de lectura de la población, que pidieron, e incluso recogieron más de un millar de firmas, para que este proyecto saliera adelante.
El horario La nueva biblioteca, que cuenta con un sistema antihurto y que será atendida por una persona perteneciente a la plantilla del personal del Gobierno de Navarra, abrirá 30 horas semanales, concretamente de lunes a viernes de 15.00 a 21.00 horas.
El presupuesto de este proyecto, incluidas las salas para la policía local, ha rondado los 230.000 euros, cantidad a la que hay que sumar los cerca de 70.000 euros que se han invertido en el mobiliario. Esta mejora, informaban desde el Ejecutivo foral, “da respuesta a una necesidad de la localidad, cuya vida cultural y social requería de un espacio mayor, que permitiese la prestación de nuevos servicios”.
