“Se comunica desde la Jefatura del Acuartelamiento Aéreo de Bardenas que con motivo de la actividad aérea que se va a desarrollar en el Polígono de Tiro durante los próximos 25, 26, 27, 28 y 29 de marzo, se procederá al corte de los caminos de acceso a la perimetral por la entrada a Carcastillo, Cruceta, y en la entrada del Acuartelamiento hacia la balsa de Zapata”.

“Tal y como se viene estableciendo desde el año 2011, la Comunidad de Bardenas Reales de Navarra prohibe nuevamente este año, a partir del 18 de Marzo, el acceso a los parajes de La Ralla, El Rallón, Sanchicorrota, Pisquerra, La Gorra y Balsa de Zapata, con el fin de preservar y garantizar la tranquilidad de las aves nidificantes. La medida se mantendrá hasta el final de la época de cría, que según la fenología anual de estas especies, variará a lo largo del mes de septiembre. La medida viene motivada por la excesiva afluencia de visitantes a algunas de las zonas más sensibles de ese Parque Natural y Reserva de la Biosfera durante los momentos más delicados del ciclo reproductor de varias especies protegidas”.

¿De verdad nadie se da cuenta de las incongruencias que se están produciendo ambientalmente en Bardenas? Estos dos comunicados aparecieron el pasado jueves a la vez en la página web de la Comunidad de Bardenas Reales, la misma que hace cosa de un mes aprobó sus presupuestos. Me llama la atención que tanto la actividad aérea como la de preservación de las especies de la avifauna pongan el acento en las mismas zonas para tratar de evitar la presencia del hombre. Unos porque podrían correr peligro dado que se estará realizando el ejercicio Sirio 2019 y, visto lo visto, una mala bala o una mala bomba, podría causar algún problema. Otro porque la presencia del hombre pone en serio peligro la reproducción de las especies porque se asustan y estresan. ¿De verdad estoy yo tan equivocado al pensar que los vuelos de los aviones, las bombas y el fuego real no perjudica tanto o más a las aves que la presencia de la especie humana? Me gustaría estos días escuchar la voz de un mediador, un relator o algún comunicado de Ecologistas en Acción o de cualquier otro grupo ecologista que pusiera negro sobre blanco si se produce esta incongruencia o soy yo que no tengo ni idea de cómo viven las aves; cosa que doy por sentada.