mitades del mes de mayo, en línea con medidas aprobadas en el Ayuntamiento de Corella y en muchos municipios de Navarra, como representantes en la Mancomunidad de la Ribera, solicitamos a su presidente que buscara una fórmula para no cobrar la tasa de basura a los comercios y empresas que habían estado cerrados durante los meses de confinamiento.

En un primer instante, guiados por las declaraciones del presidente el Sr Ferrer, parecía que podía caber la posibilidad de que se aceptara nuestra propuesta, pero la realidad ha sido otra. Primero, cobrando a todos estos comercios y empresas las tasas del primer semestre con el brutal incremento de alrededor del 15% sobre el año anterior y, en segundo lugar, ha puesto todos los recursos humanos posibles de la Mancomunidad, en la búsqueda de argumentos contra la propuesta de eximir del pago de la tasa a los comercios y empresas cerrados por Decreto Ley. El resultado es que, a diferencia de lo que ha ocurrido en la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, que no tendrán que pagar la tasa de basura en el periodo que han tenido por obligación que cerrar, los comercios y empresas riberas, de momento, no se les va a perdonar ni un euro.

Estamos viviendo momentos excepcionales, donde las administraciones públicas deben tomar decisiones arriesgadas y excepcionales. Rebuscar entre la legislación argumentos basados en una situación de normalidad nos parece de una ceguera absurda, de gobernantes insensibles ante situaciones en algunos casos dramáticas. Con seguridad, por si sola, la decisión de no cobrar la tasa de basura no remediará su situación, pero ayudará junto a otras medidas a intentar salir de unos momentos muy complicados. Sr. Ferrer, en lugar de hacer perder el tiempo a sus técnicos buscando argumentos para no eximir del pago a este imprescindible sector económico, haga lo contrario, póngalos a buscar alternativas, reformas de ordenanzas o exigir al Gobierno de Navarra cambios que permitan ayudar a nuestros vecinos y vecinas.El autor es representante de Corella en la Mancomunidad de la Ribera