Hace muy pocos días se me publicó mi cartica de homenaje sencillo a Viguiristi por su fallecimiento. En esta heladora mañana de viernes he sufrido otra punzada en el corazón al enterarme de la muerte de Jorge Rubio Unzue, mi estimado Jorgito.
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El martes me llamó precisamente para agradecerme la carta a Bigui y felicitarme el año. Me contó próximas cuestiones sobre nuestra común afición a la fiesta del toro, ya que era miembro de la junta de nuestro Club Taurino de Pamplona. Me contó bastante contento que tenía buenas perspectivas en los próximos meses. Pero la muerte que a todos nos va a llegar, ya le ha truncado a Jorgito esos sueños temporales para, así lo espero, hacerle soñar eternamente en la Luz Eterna.
Jorgito tenía un corazón como el ruedo de nuestra Monumental Pamplonesa.
Ha sabido torear en la vida. Se desgastó en su duro trabajo en la limpieza industrial con consecuencias para la salud. Sí bien, vivió siendo amigo de sus amigos y disfrutando de su afición. Atendió a sus padres y quiso a su familia. Estaba muy orgulloso de sus sobrinos (con mucha razón). Se preocupaba por las cuestiones sociales. Era un buen conversador.
Reitero que estoy helado con tantos fallecimientos de personas queridas de un tiempo a esta parte.
En los próximos sanfermineslevantaremos la montera al viento y brindaremos por nuestro Jorgito. ¡Va por tí Jorge!!! ¡Ojalá aprendamos a vivir queriéndonos más y con menos tonterías!
Jorge descansa en Paz. Goian Bego.