El 5 de diciembre envié a DIARIO DE NOTICIAS una carta solicitando mejoras en la N-121. Vuelve a la actualidad en apenas dos meses por dos accidentes en ella o sus enlaces en tres días. Uno, grave, saldado con dos muertos. Ambos con camión intermedio, en el enlace de la salida oeste de Bera, por Zalacain a la variante de la N-121.

El departamento, que dirige, hace caso omiso a la reclamación más que justificada de los alcaldes de Cinco Villas solicitando la adopción de medidas, cuya portavoz, Marisol Taberna, sabe perfectamente, por su profesión, por qué ocurren más accidentes en los llamados puntos negros. Sencillamente porque es más probable.

Entregaron, con previsión, un escrito, según dice el periódico, al consejero el 30 de septiembre citando los dos accesos a Sunbilla (en proyecto desde 2009), los dos accesos a Bera, la curva de la central de Bera, los alrededores del túnel de Lamarri, un tramo entre los dos túneles a partir de Endarlatza, la curva Montoia, el descenso de Belate a la altura de Almandotz y los túneles de Belate (que pasan más tiempo cerrados que en uso). Asimismo aluden al miedo que produce a los automovilistas cruzarse o adelantar un camión constatando que, a pesar del elevado número de sanciones (aproximadamente 3 sanciones por día en 2010), han observado que esa medida no ha hecho disminuir las imprudencias de los conductores de camiones, casi siempre apurados por llevar a Europa productos perecederos. Hoy, el problema persiste.

Llama la atención los oídos sordos del departamento que, a la vista de los siniestros que se han cobrado dos vidas y el estudio bien presentado por los ediles, conteste que "este año llevará a cabo un estudio sobre los puntos de concentración de accidentes en la red viaria (si ya se lo han dado hecho) sin la previsión de incluir el tramo de Bera". Suena irónico, si no fuera por lo descorazonador del comunicado. Sigue: "El análisis diferenciará los puntos de mayor riesgo de aquellos en los que la accidentalidad es aleatoria?". Aquí demuestra el nulo conocimiento del concepto matemático de aleatorio, al azar. Cualquier persona que sepa un poco de estadística sabe que las cosas más probables ocurren más veces y las menos probables suceden menos veces. Esa es la auténtica aleatoriedad.

Así que, señor consejero, le rogaría que haga caso a los sensatos vecinos reclamantes y vayan modernizando esos enlaces o curvas de alta siniestralidad. Eso es lo que procede mientras no llegue el ansiado desdoble de toda la N-121 en autovía o autopista. La única vía importante en el ámbito del transporte pesado que no está desdoblada en Navarra. Y lleguemos a un acuerdo con nuestros vecinos guipuzcoanos, ahora que nuestra presidenta Yolanda Barcina ha hablado amigablemente con su vecino Iñigo Urkullu.