Los miembros del EAP (Equipo de Atención Primaria) de Lesaka, reunidos el día 30 de septiembre de 2020, hemos decidido hacer pública la situación de precariedad laboral en la que nos vemos inmersos desde hace años, y que se ha agravado en los últimos meses por la pandemia que estamos atravesando. A día de hoy, 1 de octubre, tenemos sin cubrir varias plazas:-Una plaza de médico en Lesaka.-Una plaza de médico del equipo SUR (urgencias rurales).-Una plaza de pediatra en Bera al 40% de la jornada.-Una plaza de administrativo en Bera.-Una plaza de administrativo al 50 % (y los sábados por la mañana) para Arantza.-Una plaza de médico rehabilitador para la consulta de Lesaka, vacante desde febrero de 2020.Es importante destacar que la Administración conocía desde hace meses la situación a la que estábamos condenados y finalmente se ha hecho realidad a partir del 1 de octubre, ya que es en esta fecha cuando se hace efectiva la reubicación por traslado de personal, que, en nuestro caso, dejaba vacantes cuatro plazas. A ello se ha unido que, como consecuencia de la pandemia, han quedado sin cubrir los recursos que ya estaban solicitados y aprobados, o se han interrumpido los que previamente había. Existían profesionales dispuestos a cubrir alguna de estas plazas, pero la Administración ha sido incapaz de retenerlos. Si hasta ahora la falta de profesionales ha sido remediada con el esfuerzo del resto del equipo, a partir de hoy una parte importante de la población -a la que agradecemos desde aquí la comprensión y colaboración que nos han dispensado siempre- se va a encontrar sin profesionales de referencia. No parece necesario insistir en la gravedad de esta circunstancia.Somos muy conscientes del momento que estamos atravesando y de la situación general de precariedad en la Atención Primaria. De hecho, a pesar de todo, nosotros seguimos atendiendo a los enfermos crónicos, a los pacientes covid, las urgencias, los accidentes de tráfico, etcétera.Asumimos agendas infinitas con jornadas que se prolongan muchas más horas de las que nos corresponden; utilizamos nuestros vehículos, nuestros uniformes y nuestros teléfonos; asistimos a una media de tres domicilios al día por cada UBA (Unidad Básica médico-enfermera); tenemos seis profesionales cercanos a la edad de jubilación€ Pero todo tiene un límite. Somos también conscientes de nuestras circunstancias concretas: estamos lejos de Pamplona y la cobertura sanitaria de nuestra zona es difícil. Aun así, ninguna excusa es válida para que nuestra población no sea atendida en condiciones adecuadas.Queremos que esta realidad sea conocida tanto por las autoridades como por la población, y, por ello, hemos considerado imprescindible acudir a los medios de comunicación para difundirla. Reclamamos una solución urgente a una situación que, si ya es mala, solo puede empeorar. En definitiva, se encuentra en serio peligro la atención sanitaria del área de Lesaka, que los actuales profesionales sanitarios no podremos continuar desempeñando si las condiciones no mejoran.