Estamos en Navarra dentro del ranking de los más ricos en cuanto a rentas. Un 66,5% de los municipios navarros presentan una renta anual media –por habitante y año– alta, un 23,2% la tiene media-alta, un 8,8% dispone de una renta media-baja y en un 1,5 % baja. Según el INE, en 261 de los 279 municipios navarros tienen una renta media por hogar superior a los 30.000 euros. Por habitante la media serían 14.718 euros anuales, por detrás de la CAV, Madrid y Barcelona. De entrada son buenos datos pero las diferencias existen. El norte de la Comunidad foral es más rico que el sur, y las ciudades más pudientes que los pueblos. Entre los 69.468 euros (renta media por hogar) de Villamayor de Monjardin y los 21.058 de Sunbilla la horquilla es amplia (por cierto, dos excepciones en sus respectivas comarcas). Pero más curioso es cotejar los datos de los diferentes distritos de la gran ciudad que es Pamplona y su Comarca. En la comarca hay distritos que despuntan como Gorraiz con más de 75.000 euros y municipios como Galar con 48.886 euros, 56.766 Aranguren, la Cendea de Cizur con 62.142 euros y Egüés con 45.517 euros, pero la media es más uniforme. Zizur destaca algo más con 46.241 euros y Berriozar tira para abajo con 33.996 pero el resto se mueven entre los 34.6611 de Ansoáin y los 41.376 de Barañáin. Más sorprendentes quizás sean las desigualdades en Pamplona con diferencias de hasta 45.797 euros entre secciones (son 152). Aunque la media por hogar en Iruña es de 38.648 euros al año no es lo mismo vivir en el II Ensanche que en San Pedro.

No tiene nada que ver el entorno a la calle Estella y la zona de El Corte Inglés entre los top rentas –en el distrito 2, sección 3 con unos ingresos medios de 67.818 euros– o junto a la calle Monte Monjardin, en Yanguas y Miranda, en Bergamín o en Conde de Rodezno donde ganan de media sus hogares 67.741 euros, que en determinadas zonas de Txantrea (calle Canal o Valtierra) o del entorno de la calle Errotazar en Rotxapea (28.889 euros). O los 29.707 euros de lo viejo de Iruña frente a los 41.000 de Plaza de Castillo. Como hay barrios enteros donde apenas hay diferencias al cruzar de acera, es el caso de Etxabakoitz, donde las rentas no pasan de 22.021 euros, o en San Pedro, con 27.365 euros. Los barrios nuevos se mueven a su vez entre dos horquillas, en Lezkairu entre los 48.366 euros y los 38.298 euros, y en Erripagaña de 40.959 a 36.122 euros. Con menos ingresos, unos 33.000, se sitúan los vecinos del nuevo barrio de Arrosadía junto a Milagrosa (29.000). Tampoco tiene más misterio, el precio de la vivienda elige el bolsillo de compradores o inquilinos. No al revés. Cuanta más desigualdad exista en el mercado inmobiliario y menos oportunidades de vivienda asequible más diferencias sociales se crean. Etxabakoitz es un caso paradigmático de municipio estigmatizado. Y barrios como Mendillorri (32.000-34.000), en su momento de VPO, o Sarriguren (35.683-39.081), ejemplo de una clase media robusta.