Somos los trabajadores de la empresa Persianas Pamplona, y queremos hacer saber a la opinión pública, a nuestros clientes en general, que ya son dos meses, tres en algún caso, lo que llevamos sin cobrar un euro por nuestro trabajo. Desde el inicio de los problemas derivados por la crisis, la plantilla ha aceptado sacrificios y renunciado a diversos ingresos que nos correspondían, incluso aceptamos un ERE que la empresa impuso sin ninguna negociación, por no hablar de las promesas y compromisos incumplidos. También deseamos hacer saber que ni la empresa, ni mucho menos los clientes a los que hemos atendido, han manifestado la mínima queja sobre la calidad de nuestro trabajo durante este tiempo.
Queremos aprovechar para recordar al Gobierno de Navarra la injusticia agravada que sufrimos todos los trabajadores cuyas empresas no cumplen sus compromisos y deben esperar largos meses antes de recibir todo su dinero atrasado mientras las facturas se amontonan.