El sábado día 24 se cumplió un año del fallecimiento de José Luis Campo, realizándose un sentido homenaje al que fuera alcalde de Berriozar en una pequeña plaza, un bonito rincón-txoko que lleva su gran nombre, siendo merecedor de ser recordado por parte de compañeros de trabajo, Ayuntamiento, asociaciones, banda de música, amigos, políticos y otras muchas personas que han demostrado ayer y hoy los valores honestos de este obrero-alcalde. Aprovecho para aportar los buenos recuerdos que me dejó José Luis en los años que trabajamos como miembros de la plantilla de Torfinasa y posteriormente TRW Landaben. Siempre mostraba sensata disposición dialogante en los problemas que nos tocó encarar. Ante los objetivos a conseguir como trabajadores, yo volvía con confianza a conversar con él sobre temas laborales, recibiendo su cordura y respeto en nuestras conversaciones, existiendo algunas diferencias, no vitales. Fueron 42 años -él es posible algunos más- los que estuvimos produciendo, defendiendo derechos y reivindicaciones obreras.
Hoy a José Luis le pertenecía pasear y encontrarse con trabajadores jubilados, donde recordaríamos con satisfacción aquellos años con mucha voluntad y costoso esfuerzo y a continuación enjuiciar la actual situación. Tendríamos para rato, no importa, porque en ausencia de estrés, tiempo y sosiego es lo que nos sobra, además, lo que no nos van a recortar ni quitar es el ánimo, la ayuda y el apoyo hacia los nuestros. Seguro que hoy más que nunca, José Luis pensaría así. Hasta siempre, te recordaremos. Beti arte, gogoan izango zaitugu.
