Se ha publicado recientemente un libro, encargado por el Gobierno de Navarra, que abarca desde el año 1960 hasta 1986 y trata de los 42 atentados mortales cometidos por ETA durante ese periodo en la Comunidad Foral. La obra ha sido presentada personalmente por la presidenta, Yolanda Barcina. No lo he leído aún, pero la actuación parece en principio correcta: sin ánimo de venganza, hay que recordar los capítulos trágicos del pasado. Pero no se ha mantenido el mismo punto de vista con la Guerra Civil y la dictadura, ese periodo que no finalizó hasta que en el año 1977 se celebraron las primeras elecciones.

Es necesario recordar asimismo a los navarros asesinados durante la guerra, tanto a quienes lo fueron en otras provincias (ya sea en la retaguardia de la zona nacional o en la republicana) como a las más de tres mil personas masacradas aquí. También a las víctimas posteriores hasta la restauración de la democracia. Resulta además profundamente injusto que nadie haya sido juzgado por los crímenes de la dictadura. ¿Qué publicaciones ha encargado el Gobierno de Navarra sobre este periodo?

Además de ello, seguimos teniendo en Pamplona/Iruña una plaza que honra la memoria de un ministro de Justicia de Franco en plena Guerra Civil, una época en la que los tribunales condenaban a muerte por actuaciones que no son delictivas en una democracia y donde, desde luego, no investigaban ni perseguían los asesinatos extrajudiciales.

Ya es hora de que intentemos ser ecuánimes, aplicando la ley y la sensibilidad humanitaria por igual.