Oficina de Turismo

El pasado día 27 de abril los trabajadores/as de la Oficina de Turismo de Pamplona publicaron una carta en prensa a raíz de la moción que LAB iba a presentar en el Pleno del día siguiente y en la que se solicitaba la gestión pública de la misma. Esta sección sindical, por alusiones, se siente en la obligación de aclarar algunos puntos de esa carta.

Se nos acusa de haber "cometido una injusticia". ¿Acaso es injusto solicitar que un servicio público, dirigido a toda la ciudadanía, se gestione de forma directa por la administración sin que haya una empresa haciendo negocio del mismo? No olvidemos de que estamos hablando de prestar un servicio público, como pueden ser la sanidad, la educación, los servicios sociales y un largo etcétera, por los que este sindicato siempre luchará para que sean públicos, universales y gratuitos, y en los que entendemos que no tiene por qué haber intermediarios que los encarecen, restan posibilidad de fiscalización de la gestión y no garantizan una mejor calidad. No hay que pasar por alto que la mayoría de estas empresas consiguen el beneficio a costa de los bajos salarios y de las condiciones laborales de los trabajadores/as de sus plantillas.

En cuanto a la calidad del servicio nunca hemos cuestionado ni cuestionaremos vuestra profesionalidad, y cuando hablamos de ese término nos referimos a la mejora que puede tener el servicio cuando mejoramos las condiciones laborales de los trabajadores/as (vosotros mismos explicáis las condiciones precarias de estos 6 últimos años) y la ampliación a todo el año del mismo.

No creemos, por lo tanto, que hayamos cometido ninguna injusticia y, de hecho, el propio Pleno del Ayuntamiento de Iruñea así lo reconoció, al votar a favor de los tres primeros puntos de dicha moción todos los partidos de la oposición a excepción del PP. Queremos dejar claro que esta sección sindical seguirá dejándose la piel para intentar conseguir que todos los servicios que preste este Ayuntamiento sean públicos, en este caso, ha sido el turno de vuestro servicio y podemos entender el nerviosismo al que hacéis mención, ya que son vuestros puestos de trabajo, pero no podemos compartir la defensa que hacéis de la gestión privada del mismo. No olvidéis que en el hipotético caso de que se decidiera hacer una gestión pública de esta oficina, vosotros/as tendríais el mismo derecho que todos a optar a una de estas plazas gracias a los principios que rigen el acceso a la administración y que no son otros que los de igualdad, mérito y capacidad.