Bulos y desinformación
El pasado miércoles tuvimos la suerte de asistir a la conferencia Salud sin bulos impartida en el Colegio Oficial de Enfermería de Navarra por Carlos Mateos, coordinador del Observatorio de los Bulos de Salud en Internet. Dicha iniciativa se enmarca en los actos previstos para la celebración del centenario de este organismo. La sesión fue una llamada de atención en toda regla a todos los profesionales de la salud, de cualquier condición y ejercicio. Desde el Colegio Oficial de Dietistas- Nutricionistas de Navarra queremos hacer eco del mensaje transmitido. Porque en temas de salud, sobre todo, hay personas por medio.
Desde este colectivo estamos especialmente preocupados porque los bulos en alimentación están a la orden del día. Y créanme, ¡cuánto cuesta deshacer opiniones infundadas, cuánto trabajo dan! Cualquiera puede afirmar verdaderas sandeces, muchas veces amparadas por organismos que se dicen científicos, pero que carecen de rigor en el método, en la interpretación o en ambas partes. Y esto, cuando tienen una teórica razón de ser, porque no nos engañemos: casi en la totalidad de los casos priman los intereses económicos y no la verdad. Pero el mayor problema es el resultado de esta realidad: tenemos una sociedad completamente desorientada, que no sabe a qué atenerse, y que después no teme dudar del consejo del profesional y fiarse más, sin embargo, de un mensaje de WhatsApp o una foto de Instagram (puede que de un importante portal de información). También comprobamos constantemente una verdadera fiebre: parece que muchos consumidores viven para alimentarse correctamente en lugar de alimentarse sanamente para vivir.
Nos congratulamos por iniciativas como la de #SanidadSinBulos, y animamos a todos los sanitarios a ser activamente responsables: esto es, a contrastar la información para dar una respuesta de calidad a nuestros ciudadanos, y en la medida de lo posible, crear contenidos positivos en Internet y divulgarlos con acierto? Y con gancho. A ser posible.