Como cada año, los pescadores hemos esperado con impaciencia e ilusión el inicio de la nueva temporada para practicar nuestro deporte preferido. Llegada la fecha del inicio, como consecuencia de la aparición del dichoso virus, hemos visto cómo se desvanecían todas nuestras ilusiones, quedándonos en casa confinados para evitar su propagación. Hemos cumplido a rajatabla y con resignación todas y cada una de las normas que han sido dictadas, a pesar de que algunas no han sido todo lo correctas que debieran, obligando al Gobierno a rectificar de inmediato.En nuestro caso, tras el dictado de la primera norma, dio lugar a un sinfín de interpretaciones que, lejos de aclarar la situación, provocó una gran confusión en todas las comunidades autónomas. De hecho, algunas autorizaron el inicio y otras quedaron a la espera de una aclaración que resolviera definitivamente el asunto. Tras varios días de larga espera, finalmente se resuelve que se pueden practicar todos los deportes de manera individual cuando no requieran contacto con terceros menos la caza y la pesca. Nos han dejado estupefactos. ¿Acaso hay algún deporte de los autorizados que se pueda realizar de forma más individual y sin contacto con otros que la pesca?El Gobierno posee una inmensa cantidad de asesores y colaboradores que se sufragan con nuestros impuestos, que deberían evitar estas meteduras de pata. Algunos podrán pensar que la situación es muy complicada para preocuparse por un tema de menos trascendencia e importancia como la pesca. Para los que amamos y veneramos este deporte, como la mayoría de los pescadores, que son más de un millón en este país, esta resolución ha sido un mazazo a nuestras ilusiones, además de un enorme agravio comparativo con otras actividades y deportes que han sido autorizados y que pueden tener un porcentaje de empeoramiento de la situación inmensamente superior que la pesca.Señores del Gobierno, todos nos equivocamos, ustedes con demasiada frecuencia. Como ya han hecho en otras situaciones, aún están a tiempo de rectificar, y les aseguro que no se lo tendremos en cuenta.¡Pescadores! Debemos hacernos oír para que esta injusticia sea rectificada de inmediato.