Ante la reciente decisión del Ayuntamiento de Pamplona de construir un parking subterráneo en la actual plaza de la Cruz, creo que no seré el único que se pregunta lo siguiente:

¿Es necesario construir un parking justamente ahí, en la única isla verde del Segundo Ensanche, isla que amortigua la monotonía del cemento y el ruido del tráfico, cuyos árboles deben rondar los ochenta años y hacen de esa plaza un lugar singular de la ciudad?

¿Existen otras opciones válidas que eviten el arboricidio, que eviten que esa concurrida plaza se convierta en un erial y pierda todo su atractivo?