Estamos viviendo una época en la que todo se resume en la palabra progresismo, no hay otra posibilidad que no sea esa. Pues bien, yo creo que estamos ante una falta evidente de progreso real; por el contrario, estamos ante una regresión de la forma de vida, valores, cultura, servicios públicos, oportunidades, capacidad de mejorar y sobreponerse, etcétera. Solo unos detalles que deberían ser valorados por la ciudadanía en general y los políticos en particular: Educación, según DIARIO DE NOTICIAS, tenemos un gasto un 50 % superior al año 2017 y, según el informe PISA, estamos bajando puestos en el ranking.

Nuestro Gobierno dice que es por la pandemia pero ¿ésta ha asolado únicamente a nuestra comunidad? Sanidad, no tengo la cifra de gasto sanitario, pero seguramente será también muy superior a la del año 2017, pero sin embargo cerramos en Estella los partos y en Tudela las urgencias. Nivel de pobreza, 1 de cada 3 niños están en riesgo de pobreza. Vivienda, después de las mejoras de la Ley de Vivienda estamos con unos precios y alquileres más elevados y más familias sin viviendas. Impuestos, somos uno de los países de la OCDE donde más ha subido la presión fiscal.

Democracia y libertad pero solo para quienes opinan como el gobierno progresista, el resto somos fachas. ¿De verdad somos progresistas con un gobierno progresista donde se reparten los sillones desde la extrema izquierda independentista, pasando por el rancio PSOE y por la derecha, no sé si la ultraderecha vasca? O, por el contrario, estamos ante una regresión de valores, conductas, bienestar, futuro…