El 4 de julio, cuando ya había comenzado la huelga de las villavesas, la Mancomunidad sacó un comunicado diciendo que la propuesta de la empresa era “suficiente y que la huelga era injustificable”. Era un momento muy complicado en el pulso que estamos manteniendo con la empresa, y la Mancomunidad decidió posicionarse con la empresa en vez de con su plantilla. En política hay que tomar decisiones, y en este caso la Mancomunidad lo hizo.
Hace meses que los trabajadores y trabajadoras de las villavesas decidimos organizarnos para hacer frente a la avaricia de una empresa privada cuyo único objetivo es ganar dinero. Después de mucho tiempo negociando, el inmovilismo de la empresa nos ha obligado a estar en huelga desde el 1 de julio. Estaríamos más felices trabajando con normalidad y disfrutando de los Sanfermines, porque estar de huelga no es fácil. Las asambleas, los piquetes, las ruedas de prensa, las concentraciones... suponen mucha tensión, pero lo hacemos porque estamos defendiendo algo que creemos que es justo; unas condiciones laborales dignas para ofrecer un buen servicio público.
Lo que sucede en este conflicto laboral esconde la realidad de las privatizaciones de los servicios públicos. Dejar en manos de empresas privadas servicios como el transporte público permite ganar dinero a empresas como TCC Moventis a base de explotar a su plantilla. En concreto, la adjudicación del transporte público se realizó para diez años con un 14% de rebaja respecto de la adjudicación anterior.
Por todo lo anterior, queremos denunciar el papel que está jugando la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona. El comunicado que sacaron diciendo que la propuesta de la empresa era “suficiente y que la huelga era injustificable” nos parece indecente. Que la Mancomunidad se posicione con la empresa dejando tirados a sus trabajadores y trabajadoras, cuando ha sido la propia Mancomunidad la que ha provocado esta situación, bajando el precio de la licitación anterior, no tiene defensa alguna.
El presidente de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona fue elegido con los votos de EH Bildu, Geroa Bai, Independientes y Contigo Zurekin. Sinceramente no esperábamos que la institución se posicionase con la empresa y en contra de su plantilla. En los tiempos en los que UPN y PSN gobernaban nos lo hubiésemos imaginado, pero ahora se nos hace muy difícil asumirlo.
A pesar de todo lo que está sucediendo y de las presiones que estamos recibiendo, la plantilla tenemos claro que vamos a seguir peleando hasta conseguir unas condiciones laborales dignas que nos permitan ofrecer un buen servicio público.