Pamplona tiene una operadora de energía 100% pública. Suena muy burocrático pero el asunto tiene miga. La capital navarra va en línea con Barcelona en su puesta por recuperar la gestión pública de la energía. Asegurar una energía verde y de proximidad y, además, conseguir que ésta sea más barata, no es algo tan difícil. Sólo hacía falta voluntad política. La nueva empresa dependiente del Ayuntamiento de Pamplona empezará abasteciendo en un primer momento el consumo de luz de la totalidad de equipamientos municipales de la capital, colegios, edificios públicos, alumbrado... hasta un consumo de 26 gigavatios y un coste de 4,1 millones. La segunda fase del proyecto, como comercializadora que vende electricidad a terceros, abre todo un abanico de posibilidades (2020), como abastecer a aquellos vecinos que sufren pobreza energética (entre 3.000 y 4.000 viviendas). Los beneficios -huelga decir- que irán a este tipo de programas sociales, destacaba Joel Dozzi, director del servicio de Energía Verde del Ayuntamiento de Pamplona. Ofrecerá la mejor tarifa a cada ciudadano y, por qué no, podrá asesorar sobre una reducción de la potencia contratada, plantear medidas personalizadas de ahorro y eficiencia, o proponer tarifas solares para los que tengan placas en sus casas. En paralelo y de forma complementaria, el Consistorio apuesta por las renovables. Ya tenemos 25 instalaciones fotovoltaicas y, este año, habrá tres nuevas en colegios. Y existen otros 14 grupos de solares térmicas. Se baraja otro plan piloto de fotovoltaicas para irrigar de calor un bloque de vivienda social de propiedad municipal. La OEP podrá llegar a acuerdos con la MCP para gestionar toda esas energías alternativas que se generan a partir de los residuos... Ya digo, todo un mundo.

Lo importante es que poco a poco se van rompiendo los oligopolios de los grandes negocios a favor de una democratización de los servicios y de un bien básico como es la energía.

Quién sabe, a lo mejor Endesa o Iberdrola ya no serán las grandes compañías donde se reciclen los políticos para no tener que trabajar y ganar sueldazos. Quién sabe, a lo mejor muchos de los inmigrantes que traigan un trozito de sol africano en sus pateras tendrán, un día, un piso a su medida con una placa solar para arreglárselas en su nueva vida... O esa energía renovable generará riqueza en sus países de origen.

A lo mejor... Disculpen, me dicen que Amazon vende a Trump tecnología software de reconocimiento facial para deportar a inmigrantes ilegales. Los avances llevan diferentes caminos... No claudicar! No hay que dejar de remar hacia una dirección: la del bien común, la tolerancia, la lucha contra la pobreza, y la justicia. En una sociedad donde cabemos tod@s.