no sé. Igual me equivoco. Pero lo voy a soltar. Los ejemplos del deporte siempre me han parecido útiles para explicar cosas. El prestigioso analista Enric Juliana explicaba recientemente su visión del momento político y la decisión de Sánchez de convocar elecciones señalando que estaba jugando un partido de baloncesto al estilo yugoslavo: trepidante y cambiante. Era un guiño al pasado deportivo del presidente. Aquí no hay muchas mimbres para realizar ese paralelismo más allá del historial como arquero de Esparza... Tengo la impresión que en este país tenemos cada vez más una política y una prensa futbolera. Se ha perdido reflexión y se ha caído en la emoción. Medios que defienden a los suyos y critican a los rivales por sistema como el Marca o el Sport con el Real Madrid y el Barça; líderes volcados en la pizarra política con movimientos tácticos, demoscópicos y mediáticos a base de arengas de “a por ellos”... Y encima cuando te preparas para jugar un partido ya muy competido, va y te cambian el terreno de juego de un día para otro y te plantan unas generales a contrapié. Y es que los comicios del 28 de abril son a los autonómicos del 26-M lo que un partido de Copa es a la Liga: la permanencia te la juegas en casa, en la competición de la regularidad, pero un buen resultado en la Copa da moral y anima a la afición. Y lo contrario, claro... Las autonómicas están difíciles, pero las otras las carga el diablo. El que ha tomado la iniciativa es el insumergible Sánchez, que se mueve bien en el torneo del KO, pero tiene el problema en su propio equipo de barones y el “entorno”. A falta de Cruyff o Di Stefano están Guerra y González... PP y Vox corren desbocados pisando la cal, como todo buen extremo. Son la banda de la derecha a la que han arrastrado a Ciudadanos, que iba de mediocentro. Igual le meten gol al CIS, pero a ver quién quiere jugar con ellos. La izquierda ha perdido fuelle. Su tridente (Iglesias, Errejón y Garzón) tiene menos pegada que Abascal-Rivera-Casado, pero va ser clave tapar ese carril. Y luego están los catalanes, que están remontando su partido en los tribunales. Aunque claro, a estos les pitan falta por juego peligroso hagan lo que hagan desde el VAR judicial o real. Dan ganas de pinchar el balón...