os meses y medio después de que Pedro Sánchez anunciara la aprobación de un fondo especial de 16.000 millones no reembolsables para ayudar a las comunidades autónomas a paliar los efectos económicos causados por el coronavirus, todavía no se conoce con concreción cómo va a ser ese reparto. De momento, el Gobierno central ha avanzado que 9.000 millones son para financiar parte de los gastos sanitarios de esta pandemia, 2.000 para los educativos y los otros 5.000 para amortiguar la caída de ingresos. Sorprendentemente, Navarra y la Comunidad Autónoma Vasca (CAV) quedan fuera de este último paquete por disponer de haciendas propias, si bien el Estado deja la puerta abierta a compensar a estos territorios a través de sendas negociaciones bilaterales. Una decisión cuando menos inquietante, que no guarda equidad alguna, y que se ha recibido con inquietud, pese a que el Ejecutivo español está a tiempo de solventar. De hecho, desde la Comunidad Foral, tanto Navarra Suma como Geroa Bai salieron ayer públicamente a exigir que se corrija. La coalición de derechas ha presentado una declaración institucional para que el Parlamento rechace este reparto que excluye a Navarra de "forma injusta" y pide que se concrete ya la ayuda económica derivada del resto del fondo. Y Geroa Bai, socio del PSN en el Ejecutivo foral, considera "urgente" que el Gobierno de Sánchez se siente a negociar en el marco del Convenio Económico la participación de la Comunidad Foral en el "total" del fondo de 16.000 millones que ha aprobado el Congreso para las Comunidades Autónomas frente a la crisis del covid-19 y que autorice la emisión de deuda de Navarra. No debe olvidarse que la Hacienda Foral estima en 819 millones la caída de ingresos para este año, de ahí la urgencia de que no se dilaten las soluciones que contribuyan a insuflar liquidez a las arcas públicas para que se puedan mantener los servicios sin aplicar recortes. Porque hasta ahora, mientras los gastos derivados de la pandemia no dejan de elevarse -sólo en gasto sanitario Navarra ha tenido que desembolsar unos 186 millones-, los ingresos por ayudas llegan con cuentagotas, si bien es cierto que el anuncio de este miércoles de que la Comunidad Foral ha recibido 88,5 millones para pagar parte de la factura sanitaria haya sido todo un alivio.