Ojalá, la voluntad popular; por JOSEBA SANTAMARIA
De las valoraciones tras el comunicado de ETA hay dos ideas que aúnan la posición mayoritaria de la sociedad al margen de las reflexiones partidistas: que es una buena noticia que mejora el anterior mensaje de ETA de septiembre, y eso ya es otro paso. Y que aún está lejos de lo que anhela la voluntad popular: la decisión unilateral e irreversible de dejar de utilizar la violencia como instrumento para conseguir logros políticos. Esto es, que ETA asuma la necesidad de abandonar su autoconcedido papel de vanguardia amenazante sobre la vida de otros y sobre la tutela del debate político y social para avanzar en la consecución de la paz y la normalización. Ésa es la esencia de la voluntad popular que ETA sigue negándose a aceptar. Ojalá la responsabilidad e inteligencia colectivas permitan seguir en este camino hacia el fin definitivo de la violencia de ETA y de todas las violencias que asuelan este país.