o sé si se han percatado pero hoy hubieran terminado los Sanfermines. En la redacción ya estaríamos preparando los balances y en alguna esquina del periódico se habría deslizado un ya falta menos, un pobre de mí o un pobres de nosotros más empático. O todo a la vez. Así es el ciclo de la Fiesta, tan hermético la mayoría de las ocasiones como esa escalera que trepa hasta el 7 de julio desde el incipiente 1 de enero. Para que cambiarlo si funciona... En la medianoche del día 14 se han quemado muchas velas en ofrenda a los sueños recientes y a los que vendrán, y se han anudan innumerables pañuelos en la verja de San Lorenzo como quien se ata a una eterna ilusión o a un compromiso imperecedero. Siempre con la esperanza de volver a empezar al cabo de un año, aprovechar al máximo de tus fuerzas otra oportunidad que te da la vida para vivir. Pero aquel ya falta menos impreso en la edición de 2019 ha sido con el paso del tiempo un falta más acompañado de un trágico faltan muchos. Es esta la cuenta atrás más incierta y cruel de la historia. Todo lo que no ha ocurrido y lo que hemos perdido es irrecuperable. El próximo 6 de julio habrán pasado 1.088 días desde el último Pobre de Mí. Y queda camino por recorrer.
