Club Atlético Artajonés

Gracias, gracias, Ángel, Inma, Mendiola, Ganu, Chato, Alberto, Rebe, Chispas y Cris, por emplear vuestro tiempo (que es todo el libre que tenéis) en La Alameda y dais la posibilidad en un futuro que mi hijo pueda jugar allí. Estais de lunes a domingo, todas las semanas del mes, los doce meses del año (sí, cuando no hay liga hay que seguir cuidando las instalaciones). 

Cogéis el Club Atlético Artajonés hace algún año, con un equipo en Autonómica y 146 socios, pero vuestro trabajo dio su fruto, a día de hoy el club cuenta con 328 socios (en un pueblo de 1.750 habitantes), con un equipo en Autonómica, otro en regional y otro en juvenil, y abrís las instalaciones todos los viernes a Fundación Osasuna para que unos treinta niños y niñas de edades entre 6 y 12 años practiquen lo que más les gusta, el fútbol, enhorabuena.

Esta es la labor que se ve, aparte de jardinero, pintor, albañil, camarero..., pero hay trabajos que no se ven, como levantarse de la mesa en una cena un sábado y bajarse al fútbol a poner lavadoras, tender las equipaciones, preparar fichas y documentación, etcétera.

Habéis conseguido que el Artajonés pase de ser un evento deportivo a convertirse en un punto de concentración para unir a todos los vecinos de Artajona. Qué gusto da ver abuelos, padres, hijos, tíos... ¿Acaso no hay cosa más grande que ver en tu pueblo, en tu campo, a tu hermano, tu amigo, tu novio, etcétera?

La grandeza de un pueblo no reside en si es rico o pobre, reside en la fortaleza y el entendimiento que tienen sus vecinos en apoyarse unos a otros cuando el pueblo pasa por dificultades.

Lo que estáis haciéndome me recuerda tiempos pasados de Chapa, Cheve, Chopo, Churru,

 ¡¡¡Qué tiempos !!!. Decir Artajonés vuelve a ser decir Artajona.

Este es un largo camino (de años), ojalá todos los años hubiera quintas suficientes para nutrir de jugadores al club, pero eso es imposible, por esto no me quiero dejar a los jugadores que sin ser de Artajona os sentís artajonés y os queremos como tales, gracias Salinas, Lerga, Rubén,Valverde... y varios juveniles que aún no sé sus nombres, gracias.

Un sabio dijo una vez “los lugares valen lo que vale la gente que está en ellos”, por esto el Artajonés vale tanto.

Quiero aprovechar la ocasión para que el que pueda aportar su granito de arena, así lo haga, no sé, poner un rato de vuestro tiempo para un día ayudarles a colocar las redes, barrer las gradas...

Ellos son tan bonachones que no van a pedir ayuda.

Y, por supuesto, a los que estais gobernando en un edificio con la bandera de España, Navarra y Artajona, recordaros que es una instalación municipal, ¡¡¡que se note!!! Al llegar diciembre el campo de hierba natural no aguanta, son tres equipos más alguno que parece que puede salir y, por qué no, uno femenino. La última inversión fuerte que se hizo ya hace algunos años fue en una iluminación fantástica, ahora, mediante una subvención se van a poner LED, muy bien, pero yo me refiero más al día a día, semana a semana, existen campos de fútbol de hierba artificial, ahí lo dejo.

Lo dicho, gracias como padre, como socio, como artajonés y como amigo.