La dignidad no debería ser una cuestión de números
A principios de abril, desde la Red Navarra de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social participamos en las jornadas La respuesta de los servicios sociales ante los nuevos riesgos de la sociedad, organizadas por la UPNA. Un espacio en el que reivindicamos, una vez más, soluciones a las situaciones de exclusión social y pobreza que se viven actualmente en nuestra xomunidad.
A pesar de que Navarra presenta mejores indicadores sociales que la media estatal, la reducción del 18,3% de personas en riesgo de pobreza y/o exclusión social sigue siendo un reto prioritario. Este elevado porcentaje, sumado a la inquietante tendencia creciente de todos los componentes de la tasa AROPE, exige que no se produzca ninguna merma en los derechos sociales.
Para lograrlo, resulta imprescindible asegurar la atención a toda la población. El reconocimiento de los derechos y la dignidad de las personas, especialmente de aquellas en situación de vulnerabilidad, debe estar garantizado. Lamentablemente, la pérdida de respaldo legal de los derechos sociales en este ámbito ya está provocando un agravamiento de las desigualdades: muchas de las personas en situación de exclusión social grave no tienen acceso garantizado a estos servicios esenciales. Al no estar protegidos legalmente por normativas claras y exigibles, estos derechos parecen depender cada vez más de decisiones políticas y, sobre todo, económicas.
La dignidad no debería ser una cuestión que se reduzca simplemente a números, sino el punto de partida del desarrollo de dichos derechos. En consecuencia, cualquier intento de reducirlos encontrará nuestra firme oposición.
Urge fortalecer el conjunto de servicios sociales ya existentes y desarrollar nuevos recursos para responder a las realidades sociales emergentes para que el derecho a la inclusión pueda materializarse de manera efectiva. No debemos caer en la trampa de culpabilizar ni a profesionales, ni a las personas en situaciones de pobreza y/o exclusión social. Si no les damos margen de maniobra, teniendo en cuenta el origen estructural de estas situaciones, resulta impensable que puedan obtenerse resultados positivos de manera significativa.
Como Red abogamos por un sistema de servicios sociales protectores que priorice las acciones preventivas sobre las restaurativas. No sólo porque las situaciones cronificadas son más complejas de resolver, sino porque consideramos que no es necesario exponer a las personas a situaciones negativas evitables. Y que se consolide como un sistema defensor de las personas a las que acompañan frente a los discursos de odio que puedan emerger y que, en efecto, se están manifestando en la sociedad. Así pues, liderar entre todas la agenda de reforma de los servicios sociales resultará decisivo para avanzar hacia una sociedad más justa e igualitaria.
*Por Andrea Corera, Javier Huarriz, Idoia Oneca, Mikel Izurzu, Virginia Castillo, Maite Ziganda, Cecilia Mimbela. (Junta Directiva - Comisión Permanente de la Red Navarra de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social)