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El soñado debut del entrenador

mendilibar se estrena en osasuna con un gran encuentro que termina con goleada y con un repertorio de buenas sensacionesForo: ¿Cree que Mendilibar mejorará el rendimiento fuera de casa?

El soñado debut del entrenadorMIKEL SAIZ

PAMPLONA. Osasuna protagonizó ayer un encuentro eléctrico, muy por encima de lo que se asigna a las mejoras por el cambio de entrenador, con señales prometedoras acerca de las posibilidades que puede presentar desde ahora el equipo. Hubo ideas nuevas como conjunto -la presión sobre el rival, la inclinación del grupo hacia donde está el balón-, pero también un impulso distinto en los rojillos, espoleados por los estímulos que propone el nuevo jefe de la plantilla y su discurso.

Entre estas cosas y otras también muy claras, una grada muy oxigenada por el cambio de técnico -dispuesta a aplaudir mucho más-, Osasuna se fabricó un partido a medida, que fue liquidando con un acierto inusitado en las acciones a balón parado y con la inquebrantable abnegación de los jugadores, generosos en el esfuerzo, pero aplicados con las propuestas que se les han encomendado desde el banquillo.

Con cinco entrenamientos con Mendilibar, eso se vio ayer, la imagen de Osasuna ha cambiado. Indudablemente la predisposición de los futbolistas, en las que tiene que ver el nuevo técnico, ha sido otra, como también la ruta que el equipo siguió para el partido. Osasuna tenía un plan reconocible y esto resulta reconfortante después de muchos encuentros sujetos a una cierta improvisación, a la despreocupada búsqueda de la portería contraria, a un fútbol que lleva a la crispación de pura inacción. Osasuna no cambia su paso en casa -golear queda al alcance de pocos-, donde continúa siendo uno de los equipos locales más fiables, pero ayer incluyó una serie de señas con las que varios futbolistas se encuentran más cómodos.

Nekounam fue un gigante. La calidad del centrocampista iraní nunca ha estado en duda, pero ante el Espanyol aumentó su proporción. Neko se sintió cómodo desplegando ese fútbol de presión, agresivo sobre el rival que lleva la pelota y peligrosísimo en el último tercio del campo. Siempre brillante en las acciones a balón parado, nunca nadie le hizo sombra en ninguna labor. El reparto de responsabilidade en el eje, donde Puñal arropó a la zaga y el iraní flotó con más libertad, le ofreció un protagonismo que no desaprovechó. Un gol en el primer tiempo, la resolución del partido con el tanto de penalti en el segundo no dejaron lugar a dudas acerca de los galones que tiene este futbolista para Mendilibar.

Calleja también le dio la razón al entrenador. Hábil en contacto con la bola y pillo en las combinaciones con sus compañeros, al zurdo centrocampista le salió de maravilla la ejecución de las acciones a balón parado. De sus botas, de un modo u otro, surgieron tres centros que terminaron en gol -directamente con la testa de Neko, mediando el manotazo de Duscher que fue penalti o la cabeza de Soriano antes de empujarla Lolo-.

A estos dos hombres destacados, uno por su protagonismo en el marcador y el otro por adquirir el suyo llegando al once como sorpresa indudable de la alineación, les siguió el gran rendimiento coral del resto. Osasuna creó un partido muy incómodo para el Espanyol, obligado a sufrir una presión continua, a vivir muchos minutos metidos en su campo y sometidos a un ritmo frenético, sin tiempo para pensar.

La remozada imagen de Osasuna quedó reforzada por las ocasiones de gol y la finalización de la primera parte desnivelada a favor en el marcador. El encuentro terminó por sentenciarse con el segundo tanto de Nekounam a los nueve minutos de la reanudación. Con presión y organización continuó Osasuna hasta el final, sacando oportunidades de aquí y de allá gracias a su presión impecable en el último tercio del terreno y a la recuperación del esférico con una voracidad paralela al arrojo de los jugadores. Sin noticias del Espanyol -solo los líos de los García de vez en cuando cerca del área- fue languideciendo el partido, con Lolo firmando el tercer gol en otra primorosa operación a balón parado y Soriano el cuarto, gracias a la insistencia de Masoud en la banda, en otro robo.

Matando en el campo contrario, así fue el epílogo de Osasuna. Una buena introducción del nuevo entrenador y sus planes.