El turno de los socios
Miguel Archanco y Javier Zabaleta se retan hoy en las urnas con proyectos muy distintos
PAMPLONA. A los socios de Osasuna les corresponde de nuevo acercarse hasta el estadio para reclamar, como en un partido más, su cuota de protagonismo. Mucho más que en una jornada de fútbol, en una tarde en la que se pide su presencia y ánimo, los socios rojillos se presentan como decisivos y únicos para elegir al presidente y junta directiva para los próximos cuatro años.
Las elecciones de Osasuna se celebran hoy y están convocados 12.154 socios. Las votaciones se desarrollarán en el vestíbulo principal de acceso al Reyno de Navarra, en la zona de entrada a los vestuarios. Para ejercer el voto, los socios han sido distribuidos en seis mesas electorales en función del apellido. Se deberá acudir con documentación para acreditar la identidad -no es válido el carnet de socio-.
Los socios de Osasuna van a las urnas por segunda vez en los últimos diez años. Si en las últimas elecciones fueron tres los candidatos, en esta oportunidad los votantes deben elegir entre la alternativa que plantean Miguel Archanco y Javier Zabaleta.
Los dos candidatos, con más o menos actividad pública y participantes en tres debates cara a cara en tres medios de comunicación -las posturas se han ido enconando con el avance de los días de campaña-, han dirimido sus cuestiones en el apartado económico y deportivo. Ambos han coincidido, algo, en la necesidad de la contención del gasto, pero a su estilo. Archanco ha venido hablando del aumento de los ingresos por televisión -algo conseguido ya por el nuevo contrato audiovisual-, por la publicidad en la camiseta y la insistencia del equilibrio entre ingresos y gastos -ya ha comenzado la bajada de sueldos en la primera plantilla-. La deuda dice que está controlada y habla de unos ingresos por temporada de 35 millones de euros.
En lo económico, Zabaleta se ha decantado por tonos épicos -"vamos a levantar las alfombras del club"- e hípicos -"el caballo desbocado de la deuda de Izco"- para, además de insistir en la contención del gasto, parapetarlo todo detrás de un plan de una auditoría. Tras afirmar el día de la presentación de su candidatura que el presupuesto que querían manejar iba a ser de 20 millones de euros, fue matizando la cifra. Ese misma jornada, habló de una deuda de Osasuna de 71 millones de euros y el jueves, en el último debate, en Navarra Televisión, dijo que eran 84. La cuestión económica, desde luego, ha sido la más árida, la que más tiempo se ha llevado en las intervenciones de uno y otro.
la cuestión deportiva La cantera ha sido el tema principal en el que han cruzado sus argumentos los dos candidatos en el apartado deportivo. Archanco ha respaldado el trabajo de los técnicos de Tajonar, ha dado valor al hacer de los equipos inferiores y, ante las críticas de que clubes de fuera de Navarra pescan con comodidad en los clubes de la Comunidad Foral, el candidato rebatió con algunos argumentos realistas el idílico sueño de navarros solo para Osasuna, incidiendo en que las percepciones económicas ventajosas que quieren los padres por el futuro más rico en lo económico que se ofrecen en otros sitios. "Osasuna es un club de Primera y su primer equipo debe estar en Primera como objetivo irrenunciable", se puede resumir el ideario de Archanco, que defendió con datos el porcentaje altísimo de navarros en los equipos filiales.
La navarrización absoluta, casi, es la que propone Zabaleta para los equipos de las categorías inferiores, además de exigir una plantilla corta para el equipo profesional. El candidato se ha fijado en el ejemplo del Levante como paradigma en el que encontrar un presupuesto bajo y jugar una competición continental. "Apuesta por la cantera y los jugadores de casa: Tajonar y convenios con los equipos de fútbol de Navarra. Que no haya ningún niño que no quiera jugar en Osasuna, ni ningún equipo que firme convenios con otros clubes", dice su programa.
Archanco cuenta con Mendilibar y Zabaleta, que también se ha recolocado ahora soltando numerosos elogios al entrenador, ha dicho en varias ocasiones del técnico que era una carga, una herencia de la anterior junta.
Zabaleta habla en el apartado institucional de su programa de "un Osasuna de Navarra que llegue a todos los navarros y una apuesta por el cambio".
"Al osasunismo hay que agruparlo, tenemos que ir a por todos los socios de Osasuna y agruparlos en las cabeceras de comarca y en los barrios de Pamplona, al calor de bares y sociedades, que sirvan de palanca de lanzamiento para ocupar nuestro territorio", dicen
En el área social, Archanco, así lo ha expresado públicamente, ha resultado bastante más práctico ofreciendo, como medida más novedosa, el descuento para los socios en paro, también un abono familiar y autobuses gratuitos para ir al estadio.
problemas: avales y empleados Una campaña electoral en un equipo de fútbol no es una campaña política -ni aunque se quiera- y, aunque ello puede llegar a crear problemas de adecuación y actuación -se puede tender a lo segundo por puro torpe mimetismo-, las proclamas y la demagogia -también las mentiras- tienen un recorrido muy corto porque los adscritos a un club sí que tienen memoria.
Zabaleta anunció el día de la presentación de su candidatura, el pasado día 15, que contaba con los avales bancarios necesarios para él y su junta cumplir así con el requisito de la Ley del Deporte y, se comprometió él solo entonces, "a aportar la documentación en los próximos días". No ha dado noticias al respecto.
El asunto de los avales no ha sido el único charco de Zabaleta en esta campaña, sino que las críticas a los empleados de Tajonar ha llevado a unas réplicas y contrarreplicas de difícil encaje en una sana pugna electoral. Las últimas referencias a las empleadas del bar de las instalaciones han afeado más una zona no prevista para el debate. También han salido nombres de jugadores que llegan a Osasuna -el club fichó a Arribas, presentó a Sisi y hoy se podría dar a conocer la adquisicón de Armenteros- y otro que se han marchado -Raúl García-, se ha sentido utilizado.
las últimas elecciones En las últimas elecciones, el 27 de mayo de 2002, Patxi Izco fue elegido presidente tras superar con claridad a Juan Manuel Pedreño y Miguel Ángel Jaime Loinaz. El aún máximo mandatario obtuvo 5.223 votos (el 76,38% del total), frente a los 905 votos de Pedreño (13,23%) y los 486 votos de Jaime (7,11%). Las últimas elecciones de Osasuna -desde entonces, Izco había sido reelegido sin oposición- registraron una alta participación al acudir a las urnas 6.838 socios de los 13.140 con derecho a voto, el 52,04%. Fueron las elecciones con la más alta participación de las tres realizadas en el club (1994, 1998 y 2002).