pamplona - El banquillo de Osasuna no tiene muchos visos de que vaya a cambiar de inquilino. Aunque ni la directiva ni el técnico navarro quisieron ayer confirmar nada tras mantener una reunión, lo cierto es que la renovación de Martín es prácticamente un hecho a expensas de que se solventen algunos “flecos”, según fuentes del club. El tiempo se agota, urge ya un técnico, y el preparador de Campanas es el mejor situado conforme transcurren los días.

El tema del entrenador es uno de los que más quebraderos de cabeza ha proporcionado a la directiva de Osasuna. Son varios los nombres que se han puesto sobre la mesa, que se han barajado como posibles candidatos al banquillo, aunque finalmente todo apunta a que el elegido es Martín Monreal. El navarro cuenta a su favor, entre otras cosas, con que es un hombre de la casa, que conoce perfectamente el club, su estructura, y que además se ha erigido nuevamente como salvador de Osasuna tras mantenerlo, como ya lo hiciera años atrás, en Segunda División.

Este último argumento es valorado positivamente por la directiva del club que, no obstante, ha mantenido discrepancias importantes ante la posible renovación de Martín, ya que su perfil era discutido por dos de sus miembros. Buena parte de las dudas se habrían disipado ayer, en la reunión que el técnico navarro mantuvo con parte de la directiva y a la que no acudió su presidente, Luis Sabalza, al encontrarse descansando fuera de Navarra. Está previsto que el mandatario rojillo regrese hoy a Pamplona y, si hay acuerdo total, se cierre así la renovación del técnico, una contratación para la que faltarían también por concretarse “flecos” como el equipo de trabajo con el que quiere contar Martín Monreal en esta nueva etapa así como negociar con su representante el contenido del contrato. En las conversaciones entre entrenador y dirigentes, la cuestión económica nunca ha sido un asunto relevante, como no lo fue cuando Martín se comprometió para los seis últimos partidos de Liga.

El portavoz de la junta, Pedro Baile, aseguraba ayer a este periódico de forma clara que el preparador navarro “tiene opciones y gusta, por supuesto”, a la directiva rojilla. “Ya lo dijimos hace tiempo y yo personalmente. Es evidente que en su activo está el haber salvado al equipo y eso es una evidencia”, subrayaba. Los elogios del directivo no se quedaron ahí y Baile destacó que “con Martín hay una relación cordial y totalmente leal. No hay absolutamente ningún problema. Sabemos cómo piensa y conocemos cuál es su planteamiento de futuro, su proyecto. Por supuesto que cuenta”. El tiempo cada vez apremia más y zanjar el nombre del entrenador para la siguiente campaña es clave para poder avanzar en la confección de la plantilla. En este sentido, la directiva “cumplirá lo que dijo”, según aseguró Baile, “y no va a ver ningún problema. Esta semana tendremos el entrenador para la próxima campaña”. Y Martín es, en este sentido, el que reúne todas las papeletas.

martín: “una reunión distendida” Como indicó su portavoz, la directiva de Osasuna conoce perfectamente cuál es el planteamiento de Enrique Martín Monreal para el próximo curso. El entrenador de Osasuna tuvo ayer ocasión de hablar de su proyecto con parte de la directiva rojilla en el encuentro que mantuvieron. Una reunión de la que el técnico salió satisfecho, si bien no quiso dar ninguna pista. “Hemos estado bien. Bajo mi punto de vista ha sido una reunión distendida, en la que hemos hablado de todo. Yo he estado a gusto. Ahora, ellos serán quienes tengan que tomar la decisión. Yo tengo ganas de seguir entrenando”, declaraba a este medio.

Además de con la junta, Martín Monreal se habría reunido también ayer con Pedja Vasiljevic. El director deportivo de Osasuna ya presentó en su día al equipo de Sabalza una lista con varios aspirantes al banquillo navarro, entre los que estaba el nombre del actual entrenador rojillo. “El tema del entrenador es ahora mismo primordial. Son los directivos quienes deben tomar una decisión y yo creo que a final de semana se sabrá”, señalaba ayer Vasiljevic. - D.N.