Lesión en el recto anterior derecho. Rubén García se ha perdido los dos últimos partidos de Osasuna, contra Numancia y Zaragoza, por una lesión de grado I-B en el recto anterior derecho. Ayer se entrenó por su cuenta después de que un control ecográfico revelara que su evolución es positiva, por lo que irá incrementado su carga de trabajo esta semana, aunque la fecha de su reaparición sigue en el aire.

Sanción por cinco amarillas. Juan Villar, uno de los dos pichichis de Osasuna en Liga con 9 goles, no podrá jugar ante el Nàstic por sanción, ya que ante el Zaragoza vio su quinta amarilla.

Lesión en el semimembranoso izquierdo. Kike Barja tiene una lesión de grado II-A en el músculo semimembranoso izquierdo y se perderá al menos el partido del próximo sábado contra el Nàstic. Según informó ayer el club, se trata de una lesión que, aunque localizada en una buena zona, es más grande de lo habitual, por lo que existe la posibilidad de que el extremo se pierda algún partido más.

Fractura en un dedo de la mano. El delantero no se entrenó ayer, pero está previsto que hoy sí lo haga con una protección en el dedo de la mano izquierda que se fracturó el pasado sábado.

Esguince en la articulación acromioclavicular derecha. Fran Mérida fue otro de los que terminó con problemas el choque contra el Zaragoza. Sufre un esguince en la articulación acromioclavicular derecha, pero ayer se descartó que sufra otro tipo de lesiones en el hombro. Ayer completó un entrenamiento individual, pero desde el club confiaban en la posibilidad de que el sábado esté en condiciones de jugar.

Lesión en el bíceps femoral. Baja en Soria por una rotura de grado I-A en el bíceps femoral derecho, recayó el pasado jueves, fue baja ante el Zaragoza y también lo será ante el Nàstic.

Lesión en el semimembranoso. Lillo sintió molestias el domingo en la parte posterior del muslo derecho y ayer se supo que sufre una lesión de grado I-B en el semimembranoso. Es baja segura.

Pamplona - La enfermería de Osasuna se llenó ayer a rebosar en el día en el que los jugadores del primer equipo rojillo regresaron al trabajo en las instalaciones de Tajonar para empezar a preparar el partido que les enfrentará al Nàstic en El Sadar el próximo sábado a partir de las 18.00 horas. Para el duelo contra el conjunto tarraconense, colista de Segunda -excluyendo al Reus, ya expulsado de la competición-, el entrenador del equipo navarro, Jagoba Arrasate, ya sabe que no podrá contar con cuatro jugadores -Kike Barja, Luis Perea y Lillo, por lesión; y Juan Villar, por sanción-, pero además no tiene todavía la certeza de si podrá utilizar a otros tres -Brandon Thomas, Fran Mérida y Rubén García-, que ayer no se ejercitaron con el resto de sus compañeros por diferentes problemas físicos de gravedad bien distinta, aunque sí que trabajaron al margen del grupo.

Tras la jornada de descanso del lunes, hubo muchas bajas en el entrenamiento que completó ayer Osasuna. La más preocupante, la de Kike Barja, que, según el parte médico facilitado por el club, sufre “una lesión de grado II-A en el músculo semimembranoso de la pierna izquierda”. El extremo es baja segura para el partido contra el Nàstic y ayer mismo inició el tratamiento de readaptación, aunque la entidad no puso fecha a su reaparición, por lo que no es descartable que se pierda algún partido más. Resulta precisó recordar que Barja se lesionó en la primera parte del encuentro del pasado sábado contra el Zaragoza y que por este motivo fue sustituido en el minuto 25 por Rober Ibáñez.

Los que tampoco podrán jugar en el enfrentamiento contra el Nàstic son Juan Villar, castigado con un partido de sanción por acumulación de amonestaciones, ni Luis Perea ni Lillo, ya que ambos arrastran sendas lesiones musculares.

Optimismo con Brandon y Mérida En el mismo duelo también acabaron con diferentes problemas físicos Brandon Thomas y Fran Mérida, aunque desde el club se mostraron ayer optimistas con la posibilidad de que ambos puedan estar en condiciones de participar en el enfrentamiento del próximo sábado. Osasuna informó de que el delantero “sufre una fractura del tercer metacarpiano de la mano izquierda” y, aunque ayer trabajó en solitario, también le tomaron medidas para una férula protectora con la que está previsto que se ejercite hoy con el grupo, por lo que es más que probable que esté disponible para el sábado. Fran Mérida también se ejercitó al margen del grupo porque sigue arrastrando un esguince en la articulación acromioclavicular derecha, aunque las pruebas que le realizaron ayer descartaron otro tipo de lesiones en el hombro. De momento no está descartado para jugar contra el Nàstic, pero su concurso en el partido dependerá de la evolución que vaya teniendo durante esta semana.

Rubén García sube el ritmo Pese a que Jagoba Arrasate expuso el pasado viernes que Rubén García podría reaparecer el próximo sábado contra el Nàstic, lo cierto es que todavía no se puede asegurar nada al respecto. El futbolista valenciano se ha perdido los dos últimos partidos de Osasuna, contra el Numancia en Soria y contra el Zaragoza en El Sadar, por culpa de una lesión en el recto anterior derecho y, aunque su evolución es buena, como informó ayer el club, su participación en el choque del sábado va a depender de cómo se encuentre el jugador en los próximos días. Ayer se volvió a ejercitar por su cuenta, como ya hizo la pasada semana, y la intención es que se reintegre en el grupo en los próximos entrenamientos.

Cuatro con cuatro amarillas

Nacho Vidal, Brandon, David García y Kike Barja. Además de la plaga de lesiones que están sufriendo los jugadores de la primera plantilla de Osasuna, el conjunto navarro también tiene otro problema añadido, que es el alto número de futbolistas con cuatro tarjetas amarillas. Nacho Vidal, Brandon Thomas, David García y Kike Barja se encuentran en esta situación, es decir, a una amarilla de perderse un partido por sanción. Por detrás, Unai García, Oier Sanjurjo, Carlos Clerc y Roberto Torres aparecen con tres cartulinas cada uno, por lo que en las próximas semanas todos ellos podrían verse afectados con el castigo de un duelo sin jugar.